Han pasado ya muchos años desde aquella primera edición del CanelaCore y pocos, ni siquiera ellos mismos, habrían podido augurar la evolución del CanelaParty: un monstruo de diversión que sigue rodando montaña abajo, haciéndose más grande y ganando nuevos adeptos. Hoy conocemos algunas anécdotas de todos estos años, momentos irrepetibles dentro de un festival mágico. En las listas de deseos de los miembros del Culoactivo Canela quizás estén los cabezas de cartel de los próximos años. Despacito y con buena letra, como llevan haciendo todos estos años.

¿Qué concierto recuerdas con especial cariño de las 8 pasadas ediciones del CanelaParty?
Álvaro: Esta es una pregunta muy difícil. Pero creo que me quedo con Dan Deacon tocando a ras de suelo en 2012 rodeado de gente feliz. Muy feliz. Jodidamente feliz. Recuerdo subirme al escenario para ver bien lo que pasaba desde arriba y un escalofrío me recorrió el cuerpo. Ese era sin duda el mejor lugar de la Tierra en el que alguien podía estar en ese momento. Cuando descolgamos la piñata gigante con forma de robot que nos regalaron sobre el público fue algo mágico.
Beto: Sin duda el más emotivo fue el de Dan Deacon. Era algo con lo que soñábamos desde hace años y cuando lo tuvimos allí con nosotros fue algo increíble. Recuerdo buscar entre la multitud a Nanel y fundirnos en un abrazo. Pero creo que me quedo con el concierto de Metz de 2013. Antes de venir ya se habían convertido en mi banda favorita de los últimos años. Llegaron a Málaga destrozados porque el día antes la compañía aérea les había perdido TODO. Pero cuando vieron lo que allí había montado, cambiaron el chip y dieron el concierto más bestia que he visto en mi vida. Una auténtica apisonadora. Además son unos tíos majísimos y nos dieron las gracias por una noche así. La despedida de Notes to Myself fue mágica también.
Antonio: Elegir sólo uno me resulta casi imposible. Así, a bote pronto, destacaría por emotivo y por el cariño personal que les profeso, el concierto de despedida de Notes to Myself en el Canelaparty 2009. También me hizo especial ilusión ver a Dan Deacon, al que se llevaba varios años intentando convencer para que viniera a actuar y, verlo hecho realidad, tocando entre montañas de confetis y pedazos de disfraz volando, fue espectacular. También Metz, The Growlers, Nueva Vulcano… Lo bueno de formar parte de la organización de algo así es que todos los artistas que intentamos que participen están entre nuestros predilectos, así que cada vez que se confirma alguno, es una enorme satisfacción para nosotros.
Juanma: Una pregunta bastante difícil, el concierto que me tocó hasta lo más hondo de mis emociones fue sin duda el concierto de despedida de Notes to myself en 2009 y por muchas razones. Primero, porque representan una época de Málaga muy bonita y que recuerdo con mucha nostalgia, aquella en la que unos ilusos tuvimos la oportunidad de traer a Engine down, Mono, Last days of april o Minus the bear a nuestra querida ciudad del sur de Europa, siempre que buscábamos teloneros tirábamos de Notes sin pensarlo. Segundo, porque es un grupo de amigos que si hubieran nacido en cualquier otra parte del mundo igual hubieran llegado a ser un grupo de culto. Tercero, porque desde el primer momento en el que escuché “Radio never plays…” recuerdo el estallido de júbilo y alegría con el que todos despedimos a la banda, de hecho ahora mismo escribo estas líneas y se me siguen poniendo los pelos de punta. Fue nuestra edición más DIY y sin duda un turning point en la trayectoria del festival.
Juan Antonio: Recuerdo dos bandas con mucha ilusión en 2014. La actuación de Quintron and Miss Pussycat. El teatrillo de marionetas hinchable, la tarta de chocolate y la de weed discutiendo sobre las virtudes de cada una, la “Drum Buddy” de Quintron en pleno efecto, una puesta en escena muy interesante… Pienso que esta pareja forman una banda acorde al espíritu del festival. Otro grupo que me embriagó de buen sonido fue The Government. Puro soul­rock efervescente para todos los asistente de aquella noche de jueves en Velvet Club. Lluvia de confeti y derroche de talento y pasión tanto arriba como frente al escenario.
Nanel: el concierto de Dan Deacon fue como alcanzar el Nirvana Canela, desde que apareció en la sala con sus maletas llenas de cachivaches y rodeado de un aura tan festiva ya empezamos a darnos codazos con la risa tonta imaginando la que se iba a montar y cuando apareció en escena y comenzó el show nuestras caras se convirtieron en gigantescas sonrisas de satisfacción, sólo queríamos bailar, engullir confeti, abrazarnos y darnos la enhorabuena por haber traído a ese genio. Quintron fue también un concierto memorable, así como la emotiva despedida de Notes To Myself o el directazo de Metz.

Es vox populi que vuestras fiestas dan para muchas anécdotas. ¿Alguna a destacar?
Álvaro: 2009. Recinto ferial de Torremolinos. Domingo post­Canela. Mi primo Jaime despierta dentro de un coche con su amigo Víctor. Están vestidos de mujer. Salen del vehículo y hay un mercadillo montado a su alrededor. Se cambian y se alejan del lugar a pie, sin poder sacar el coche, ante la incrédula mirada de los tenderos.
Beto: La de Jaime, el primo de Álvaro, es una obra de arte, sin duda. El año que disfrazamos al Vallejo de El Cautivo vivimos una situación muy guapa. Ya había terminado todo, era ya de día y yo estaba llevando en coche a algunos cadáveres a sus casas. Y justo cuando pasamos por la Tribuna de los pobres (enclave típico de Semana Santa) nos encontramos justo allí al Vallejo. Fue muy absurdo verlo allí. Le pegué una pitada que despertó a medio centro de Málaga. ¡El Cautivo Canela!
Antonio: Anécdotas hay para escribir un libro. El hecho de que todos vayamos disfrazados, músicos incluidos, desinhibe y da mucho juego. Me quedo con nuestro compañero Nanel, disfrazado de Karate Kid, creciéndose por momentos ante la cámara del photocall e intentando hacer una pirueta imposible sobre la pared para acabar atravesándola de una patada y perder un zapato dentro de la misma. Resultado: el tobillo hinchado como un balón de playa y nosotros pidiendo disculpas a los responsables de la sala que, muertos de risa, no daban crédito.
Juanma: La historia del primo de Álvaro creo que está en el top canela, pero todavía recuerdo cuando mis colegas Raúl y Laura volaron desde Londres vestidos de Lorena Bobbit y su marido desde que montaron en el avión, con un miembro de gomaespuma en la mano por supuesto.
Juan Antonio: De nuevo 2014. Un amigo estaba cansado y se marchó a echar una cabezada en mi coche que se encontraba aparcado cerca del recinto de celebración del sábado. Poco antes del amanecer se despierta sobresaltado por unos extraños ruidos a sus pies. No lograba entender que oyese tanto ruido y no hubiese nadie a su alrededor. Por más que se esforzaba no veía a nadie. Entre asustado e irritado, abrió la puerta para buscar el origen de tal jaleo y se encontró con otro amigo agazapado bajo el coche que había decidido gastarle una broma de esa manera.
Nanel: el año pasado en la vuelta a casa post­canela nos metimos en mi nissan micra 6 personas, faltaban coches y era domingo y suficientemente temprano como para cruzar Málaga sin ser descubiertos, de hecho fuimos sin un sólo vehículo hasta la Avenida de Andalucía donde apareció un coche de Policía Nacional que llevamos delante nuestro durante varios kilómetros, iban a 30 por hora y no nos atravíamos a adelantar por lo que íbamos super pegados. Los únicos 2 coches en la carretera eran ellos y nosotros muy discretos, justo detrás con todo el sol mañanero en la cara, 6 tíos disfrazados, con pelucas y algunas caras pintadas en un micra, lo debieron flipar por el retrovisor.

Es una pregunta difícil, pero ¿con qué disfraz de todos los que han pasado por vuestro photocall te quedas?
Álvaro: De nuevo una pregunta complicada. La creatividad de la gente no deja de sorprendernos cada año. En la pasada edición me dolió que finalmente el disfraz de “Peruano y Llama” no se llevara premio. Un tipo con pinta de peruano se había vestido como tal y había disfrazado a su novia de llama. La imagen era impagable, pero encima la chica tenía un mecanismo de agua por el que el animal escupía. Oro.
Beto: Hay tantos que es difícil, pero grupal me quedo con el de los tronos. Una auténtica obra de ingeniería canela. ¡Mi novia era la Virgen de Batman! Individual creo que el de Alvarito de Cary Grant en “Con la muerte en los talones” o el paleto abducido por el ovni o el de Apu con pelotas de ping pong por ojos. Ufff ¡pondría mil! ¡El gran Bernie Lomax!
Antonio: Ésta sí que es difícil. La imaginación del público canela no tiene límites y cada año supera al anterior. A la hora de entregar los premios hay que hacer un gran esfuerzo para decidir quién los recibe. Lo que más me fascina es cómo muchos se meten en el papel hasta llegar a ser completamente poseídos por la personalidad del personaje que representan. Torrente llegando en su coche con El Fary sonando a toda castaña y hablando como él tooooda la noche, los personajes míticos norteamericanos de lucha libre con ring incluido, Godzilla asolando los rascacielos iluminados de Tokyo, la carga del 7o de caballería, los disfraces conceptuales en general…
Juanma: La verdad que siempre he disfrutado el estar fuera de la sala momentos antes de que empiece el festival, y ver cómo la gente va apareciendo con sus geniales disfraces, la creatividad de la gente no tiene límites. Sin irme mucho por las ramas con la pregunta, creo que uno de los mejores disfraces que han pasado ha sido sin duda el del grupo de los tronos, o si tengo que elegir uno individual… el disfraz de Bender de Dani Drunkorama!
Juan Antonio: Uf! Si que es una pregunta complicada. Son tantos y tan buenos que da pereza elegir solo uno. Tengo inclinación por los disfraces individuales o los de pareja que exigen cierta complicidad entre ambos. Recuerdo con cariño una pareja, él escrupulosamente caracterizado de James Joyce y ella de su gran obra “literalmente”, un “Ulises” tamaño xxl. La imagen de los dos cogidos de la mano, me resultó entrañable. El Cristo Cautivo con el escudo del Málaga C.F en el pecho, que genialidad. Aquel redneck siendo abducido por un ovni, maravilloso. El Cary Grant de “Con la muerte en los talones”, perseguido por el avión, inimitable. Un Bender hecho a base de tubos de pvc cuya cabeza andaría dando tumbos toda la noche y parte del día siguiente. Los tres descerebrados de la película protagonizada por Paul Newman, “El Castañazo” Jo, tio!! Imposible misión decidir sólo uno entre tantos y tan buenos.
Nanel: quedarse sólo con uno es como tener que elegir entre uno de tus hijos, la gente ha establecido un nivelazo que actualmente a mi me acojona no estar a la altura. A mi me impresionó mucho el disfraz colectivo de “Playa” que se curraron los de Conspiracy Studio, llevaban un barco, que tiraba de una salchicha flotante, en la que iban subidos la señora con la sandia y algunos bañistas más y perseguidos por tiburones y gaviotas…todos dando vueltas durante los conciertos, una joya. Disfraces individuales: Torrente, Barbie con caja, Apu con las pelotas de ping pong en los ojos, señor abducido por OVNI, Bender…hay muchos y son todos pura magia.

¿Qué comentario sobre el CanelaParty te ha hecho sentir más orgulloso?
Álvaro: Los gestos son mejores que las palabras. No recuerdo en qué edición fue, pero hubo un momento épico. Un par de amigos me dieron un abrazo de agradecimiento y en unos segundos aquello se convirtió en una vorágine de cuerpos y brazos. No sé cuánta gente me estaba abrazando. Era un cúmulo de energía brutal. Un “gracias” mudo salpicado de grandes sonrisas, besos y confeti.
Beto: Un simple “gracias” puede llegar a ser lo más sincero del mundo. El año pasado, justo de después de terminar el Mini Canela, Álex (Maine / Varaverde) me dijo: “Hoy por fin ha empezado el verano”. Otra vez estaba en Madrid después de un concierto de Arcade Fire y Fucked Up. Una cola inmensa para el guardarropa. Me tocan por detrás. Un tipo me dice que si yo era uno de los tipos del CanelaParty. Nos ponemos a hablar y un colega que iba con él le pregunta “¿Qué es eso de CanelaParty?” y su respuesta fue tan demoledora que ha ido en la portada de nuestro dossier durante varios años. Después de segundos de silencio pensando dijo “El Canela no se puede explicar con palabras, tienes que ir”. Al día siguiente del CanelaParty 2014, Matt de los Growlers soltó “This is the happiest place in the world”. O ver a Dan Deacon en la puerta con la carilla de “no me quiero ir de aquí” fue bestial también.
Antonio: Uff… cada vez que termina una edición y encuentras a alguien en la puerta o de camino a ella que te da las gracias y te abraza con una sonrisa de oreja a oreja, te dices a ti mismo que tanto esfuerzo y sacrificio ha merecido la pena. Después, cada vez que sales de Málaga y te encuentras con gente de Barcelona, Madrid, Valencia, Asturias… que te recibe con cariño y alaba las bondades del Canelaparty, engordas varios kilos de golpe.
Juanma: La verdad que siempre hay muchas palabras de cariño y de afecto de la gente más allegada, pero sin duda una de las cosas que me hace sentir más orgulloso es que una pareja de amigos se conocieron en una edición del Canelaparty y celebran su aniversario en las mismas fechas. No es un comentario propiamente dicho, pero el hecho de que el festival en sí sea algo tan importante en la vida de dos personas… Me parece espectacular!

Juan Antonio: Más que un comentario fue una anécdota “mágica” que no podría definir en términos de orgullo pero que contaré a pesar de quedar como un sensiblero. En el verano del 2014, justo al terminar la octava edición del CanelaParty, marché de viaje a Asturias. Una de las noches que pasé allí, acudí a un concierto y justo antes de empezar decidí salir a fumar. En la puerta de la sala había un grupo de seis o siete personas que hablaban de un festival al que habían asistido unos cuantos amigos suyos y en el que lo pasaron a lo grande. Tratándose de música y festivales, asumí ser del todo indiscreto y puse el oído a su charla. Cual fue mi sorpresa al descubrir que hablaban de un festival en el que la gente iba disfrazada. No daba crédito ¿A cientos de kilómetros de Málaga?,me preguntaba. Naaaaa. Por una parte, no pude resistir la tentación y por otra necesitaba saber que festival era ese. Recuerdo que me repetía, no es posible, debe haber otros conciertos en los que el público acuda disfrazado. Con más miedo que vergüenza, me acerqué a ellos para preguntarles de qué festival hablaban y… siiiiii, era del Canela. Resultaron ser amigos de amigos. La piel de gallina, tronco.
Nanel: recuerdo que al término de la sexta edición me paró un tipo sin disfraz y me dijo que él era hip­hopero, que estaba ayí de prestado acompañando a unos amigos porque no tenía plan esa noche y que los grupos que habían tocado le parecían todos una soberana mierda…pero que jamás en su vida había estado en una fiesta mejor que la de esa noche y que no se iba a perder ningún Canela más, luego me dio las gracias y nos dimos un abrazaco bien sudado. Una vez que pruebas el Canela es difícil no repetir, es mucho mejor que la pizza.

¿Qué le dirías a alguien que va a asistir a vuestro festival por primera vez en su vida?
Álvaro: Creo que solo le daría un abrazo y un beso en la frente. Cualquier cosa que le pueda decir se quedará corta.
Beto: Enhorabuena, estás en el sitio correcto y a la hora correcta.
Antonio: Tú aún no lo sabes, pero tu concepto de lo que es un festival, pasarlo bien y tu forma de ver la vida, en general, va a cambiar a partir de ahora. Será tu primera vez y desearás desesperadamente que no sea la última.
Juanma: Todavía no lo sabes pero te vas a tirar 364 días contando atrás para la siguiente edición
Juan Antonio: Que se apunte a todas las venideras pues ya se ha perdido ocho ediciones de derroche, alegría y diversión.
Nanel: estás a punto de llegar a una nueva etapa en tu vida, hay un antes y un después del Canela muchacho, como cuando te enrollas con una chica por primera vez, te lo podría intentar explicar con palabras pero me quedaría muy corto, el Canela lo tienes que vivir.

CANELAPARTY DREAM PLAYLIST

ÁLVARO:

BETO:

ANTONIO:

JUAN ANTONIO:

JUANMA:

NANEL:

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