Este verano Olo Surf History: Centro de Investigación de la Historia del Surf y del Bodyboard, ha sacado a la luz el primer libro sobre la historia del surf y del bodyboard en Málaga. Se trata del mayor estudio jamás realizado de una historia local del surf en cualquier lengua y en cualquier parte del mundo.
Málaga Surf: Un libro histórico
Un libro es solo el principio. Málaga Surf: Historia del Surf y del Bodyboard (1970-2000) es un libro centrado en la historia local o provincial, pero engarzada en su contexto regional, nacional e internacional. El libro no es una descripción de historias basadas en memorias imprecisas, sino un trabajo minucioso de reconstrucción (hasta donde se ha podido) de los principales capítulos y personajes de la historia del surf en Málaga, basado en el análisis y contraste de los testimonios con fuentes documentales. Este libro es hermano de La Historia del Surf en España, que salió a la luz meses antes y del que Staf Magazine ya hizo eco.
Pepe Almoguera a principios de los 70 con una Barland comprada a un extranjero en el camping de los Baños del Carmen.
Rafael García González, apodado cariñosamente el Rata, a mediados de los 70 en la desaparecida izquierda de las Acacias, Pedregalejo.
11 capítulos. Entre ellos se describe la metodología o los pasos de la investigación, los principales problemas para abordarlos; de cómo el surf nació en la Polinesia y se expandió por el resto del mundo hasta llegar a España y el Mediterráneo; de cómo gracias a Pepe Almoguera el surf no solo nació sino que creció y se desarrolló en el barrio de Pedregalejo a partir de 1970; de cómo se le fueron uniendo otros jóvenes hasta fundar el primer club activo de surf del Mediterráneo español en 1974, y cómo se relacionaron con otros surfistas de Cádiz, Canarias y el Cantábrico.
Darío Martín Ruiz, de Pedregalejo, gran surfista que nunca quiso competir, inspiró a principios de los 90 a otros grandes surfistas de hoy que por entonces estaban comenzando, como José Leiva. Foto de 1991.
Nace Torremolinos, resurge Pedregalejo. Posteriormente observa cómo surgió el surf en Torremolinos a partir de finales de los 70 y principios de los 80; de cómo se expandió a otros municipios costeros en los 80 (Benalmádena, Fuengirola, Marbella); el porqué el surf en Pedregalejo entró en decadencia con la reconstrucción de la playa y el paseo marítimo a principios de los 80 (y de cómo renació años después con una nueva generación de jóvenes); también narra el nacimiento del bodyboard; de los primeros campeonatos; del nacimiento en 1991 del primer circuito de surf y bodyboard de Andalucía; de la influencia que tuvo en el surf el Club Costa del Sol, fundado en 1991, por Agustín Larraza; y un largo etcétera que culmina en las conclusiones con diversas explicaciones del porqué, entre ellas por qué Málaga fue pionera del Mediterráneo.
Torremolinos en acción. Joose Yagüe a finales de los 80.
Documentos históricos. En esta obra se citan y/o ilustran a más de 500 surfistas y bodyboarders de los años 70, 80 y 90 de toda la provincia de Málaga, y también de otras provincias de Andalucía y España. Contiene más de 100 ilustraciones y documentos como: a) Fotografías de surfistas y playas en los años 60, 70, 80 y 90 que rescatan el espíritu de la época; b) Documentos y cartas federativas; c) Telegramas; d) Actas de campeonatos y clasificaciones del primer y segundo circuito de Surf y Bodyboard de Andalucía de Surf (1991/92 y 1992/93), donde aparecen cerca de 200 deportistas malagueños y andaluces de la época; e) Documentos del primer club de surf de la historia del Mediterráneo: el Málaga Surfing Club (años 70), y documentos del segundo club de surf de la historia de Málaga, el Club de Surf Costa del Sol.
El Palmar de Vejer, Cádiz, meca del surf en Andalucía. En esta foto de 1993, conexión Norte-Sur. Pedro González Alegre (izquierda), surfista y juez habitual en los primeros campeonatos de surf en Málaga y Cádiz; y a la derecha, el vizcaíno Enrique Artero, por entonces uno de los mejores tablistas de España.
Ni tiene, ni quiere. Lo que nunca nadie podrá escribir, y este libro ni ha querido intentarlo, es la historia de cada uno, esa que cada uno guarda con cariño de sus inicios, de sus experiencias, de sus viajes con sus amigos, de sus retos, miedos y leyendas ante las olas. Esa historia, o mejor dicho, ese tipo de historias, siempre deberán ser narradas en la intimidad del grupo, pues solo así se mantiene su fuerza y magia.
La Playa de la Malagueta en 1991, justo cuando acabaron las obras de regeneración del litoral malagueño. Estas obras acabaron con el extraordinario pico del Club Mediterráneo, pero sorprendentemente para todos, se crearon varios picos de gran calidad entre el Palacio Miramar y el club Mediterráneo. Picos que desaparecieron a comienzos del siglo XXI con las obras y finalización del gran dique de Levante del puerto de Málaga.
Estampa del surf y del bodyboard malagueño durante el campeonato ADEPT en la playa de la Misericordia, en enero de 1994.
Málaga Surf es un homenaje al arte de montar las olas, a Málaga y su mar, y sobre todo a la gente que desde abajo y por iniciativa propia ha construido esta extraordinaria historia de mar: marinería moderna que no navega sino que surca olas. Es la historia de un tiempo de cambio y el surf uno de sus síntomas: libertad y modernidad.
Dos libros que sitúan a España en la vanguardia investigadora y académica de la historia del surf en Europa. Dos referencias bibliográficas de gran éxito.
A OLO SURF HISTORY
Enlace al libro Málaga Surf
Enlace al libro La Historia del Surf en España