Supongo que, a estas alturas, pocos lectores de la revista ignorarán en qué consiste el Canela Party, también conocido como pitote (del latín ‘pitotum’) y que consiste en un alboroto o barullo a causa de una pendencia con el agravante de que, los alborotadores o pendencieros, van disfrazados, entiéndase, con la finalidad de ocultar sus verdaderas identidades de manera que, los acusados como causantes últimos de los alborotos, terminan siendo Bob Esponja, Espinete, o la ola del Melillero. Este pitote, organizado por el Culoactivo Canela, viene celebrándose en Málaga desde hace ya más de una década, y, precisamente, este 2017 tendrá lugar la XI edición y, desde Staf, nos alegramos y enorgullecemos de llevar todos estos años apoyando esta noble causa. De todos modos, para aquellos que no hayan estado nunca, voy a resumir mi experiencia del pasado año la cual puede resultar ilustrativa: llegó la hora señalada y yo había llenado el maletero de mi coche con combustible más que suficiente como para atravesar la totalidad de la noche con el acelerador pisado a fondo, y, antes de ver a Delorean sobre el escenario, ellos vinieron a verme a mí. Primero se acercó el guitarra a repostar un poco y luego acabaron todos los del grupo con nosotros. El cantante pilló mi monopatín y se puso a hacer ollies al tiempo que preocupantemente cerca (si tenemos en cuenta que mi coche era un bar improvisado y clandestino) sonaba la sirena de un coche patrulla de la policía local y, simultáneamente, una caravana recreaba en plena calle (camiones incluidos y pancartas) la pasada huelga de Limasa. Al cabo de un buen rato, tuve un instante de lucidez y les dije a los del grupo que creía recordar que ellos formaban parte del cartel. Entonces entramos todos al galope, y en efecto, dentro de la sala, estaba terminando de tocar otro grupo y sucediendo ese tipo de cosas que acostumbran a suceder en los festivales al uso. El Canela es una experiencia única. Algunos festivales están hechos con una mezcla de corazón y de cabeza, mientras que el Canela está hecho con una mezcla de corazón y de culo pero, al contrario de lo que puedan pensar, no apesta sino todo lo contrario, huele a gloria bendita.

La XI Edición del Canela Party tendrá lugar, como viene siendo costumbre, en agosto y, hablando del mes más caluroso del calendario, ¿os dice algo la siguiente frase? ‘La maté en agosto, la caló apretaba’.
Hombre, ¡cómo no nos va a decir algo! Es una de las muchas frases épicas de nuestro Dios, Chiquito de la Calzada. El Verano en Málaga son muchas cosas: espetos, biznagas, terral y, desde hace 10 años, Canela Party.

¿Podríamos definir el Canela como un festival de perros disfrazados de niños? Mejor reformulo la pregunta: ¿cómo definiríais a vuestra criatura empleando una sola frase?
El Canela es una movida gordísima. Es la locura de una fiesta de disfraces en medio de un montón de grupos que no dan crédito a lo que están viendo entre el público. Como ya hemos dicho muchas veces, el Canela es el único festival donde los grupos vienen a ver al público.

Cuando os embarcasteis en esta aventura, ¿llegasteis a imaginar remotamente que llegaría el día en el que estuvieseis organizando la celebración del décimo aniversario?
Sinceramente, ni de coña. La segunda edición ya fue un logro para nosotros. Así que estar a punto de celebrar la undécima es algo que nunca habríamos podido pensar allá por 2007. Con el paso de los años nos hemos ido profesionalizando, aunque seguimos abogando bastante por el D.I.Y.: hazlo tú mismo, pero hazlo bien.

Como suele pasar con los grupos, en el caso del Culoactivo Canela, también ha habido idas y venidas. ¿Quiénes integráis el proyecto a día de hoy y cómo os distribuís las tareas?
Sí, como bien dices siempre ha habido cambios. La vida da muchas vueltas y las obligaciones a veces no te dejan tiempo para todo. El Canela es un hobby para nosotros, así que muchas veces hay que sacrificar cosas en detrimento de otras. Aún así, nosotros seguimos pensando que el Canela Party es lo mejor que hemos hecho en nuestras vidas. El Culoactivo Canela está formado actualmente por cuatro personas: Antonio, que se encarga de la gestión y de solucionar un montón de marrones; Álvaro, que está detrás de las tareas de diseño y eventos; Juan Antonio, que coordina parte de la promo y la gestión de movidas y Beto, que lleva lo que ahora se conoce como marketing, promoción y eventos. Realmente todos echamos una mano con todo. Somos cuatro amigos haciendo algo que nos encanta. Hay épocas, como ahora, a pocas semanas del pitote, que todos tenemos que estar a una. Desde aquí queremos agradecer y mandar un abrazo enorme a todos los que en algún momento han formado parte de la organización. Sin la aportación de todos y cada uno de ellos, hoy no estaríamos respondiendo a esta entrevista.

¿Hay alguna persona/s o animal/es que represente mejor que ninguna otra el espíritu del Canela Party?
Por suerte creemos que el Canela Party es un festival muy heterogéneo y tampoco podemos decir algo que lo represente al 100%. Pero si hay que decir un animal, diremos un que ornitorrinco 🙂

A la hora de crear y darle forma a vuestro particularísimo festival, ¿os inspirasteis en alguno ya existente o teníais en mente algún festival que os sirviese de referente? Y, dándole ahora la vuelta a la tortilla, ¿os han copiado ya el formato?
Todo esto empieza por The Skirmish Society, que siempre se disfrazaban y tiraban confeti en sus conciertos, así que cuando nació el Canela, nació con esa premisa: confeti y disfraces. El Funtastic también empezó siendo una locura de disfraces, pero no lo conocíamos cuando empezamos. Podríamos decir que era un referente sin saberlo.

A los que nunca han estado en ninguna edición del festival y a los que han estado en todas o casi todas, ¿qué les diríais para convencerles de que no pueden perderse ésta?
A los que nunca han estado tan solo decirles que si quieren pasar el día más divertido del verano no pueden faltar al Canela. Hay gente que viene por la fiesta de disfraces, otra que va por los grupos, pero al final, no hemos conocido a nadie que se lo haya pasado mal. Es más, creemos que podemos garantizar que es la mejor fiesta del mundo. A los que ya han venido ya saben de qué va esto. Hay mil festivales pero ninguno como el Canela.

Una de las características del Canela Party es que, tanto el público como los grupos, deben ir disfrazados. ¿Os ha puesto alguna vez algún grupo alguna clase de reparo al respecto? ¿Cuál ha sido el disfraz que más os ha impactado a vosotros como organizadores?
No, nunca nos han puesto ninguna pega. Pero sí es cierto que muchas veces los managers, sobre todo los internacionales, no les avisaban de qué iba esto. Lo bueno que al llegar han flipado al ver el panorama. Este año Metz y Holy Fuck vienen avisados y tenemos constancia que están ya trabajando en sus disfraces. Uff, disfraces geniales ha habido muchos: los tronos de Semana Santa, Con la muerte en los talones, la guerrilla del Congo, el paleto abducido por el ovni… no podríamos elegir uno.

¿En qué consisten este año las actividades previas al festival?
Hemos hecho dos conciertos presentación en Madrid y Málaga y otra fiesta más en Málaga. Como ya sabéis, el festival consta de 3 días: pistoletazo de salida el jueves en Velvet, fiesta de disfraces de niños y mascotas al aire libre y gratis el viernes y, por último, el gran pitote del sábado.

¿Qué grupo, en caso de que sea confesable, quisisteis traer al festival y, o bien os dio calabazas, o simplemente fue imposible cuadrar las fechas o pagarle lo que os pedían?
Les Savy Fav. Estuvimos hablando con el cantante. Flipó con el Canela. Luego ya intervino el manager y nos pidió una cantidad absurda. Pero tenemos la suerte de haber traído a alguna de nuestras bandas favoritas y seguro que vendrán más.

¿Por qué os gusta tanto fabricar palabras nuevas usando, generalmente, la palabra culo como materia prima?
Nos gusta culoccionarlas. Nacimos defectuosos, tenemos tendencia a mierdas así. Pero luego somos unos tíos serios.

Siguiendo con el tema del pompi, ¿tiene alguno de vosotros a día de hoy almorranas de tanto pegar el culo a la silla para sacar adelante este magno evento?
La verdad es que se echan muchas horas con el Canela. Como ya hemos dicho antes, para nosotros es un hobby. Durante muchos años hemos puesto dinero mensualmente, como todo buen hobby. Pero desde hace ya unos años el festival se auto-gestiona. Todo lo que se saca se reinvierte para el año siguiente. Hay gente que piensa que nos hemos hecho ricos con esto. Nada más alejado de la realidad. Perdón, nos tenemos que ir, que viene nuestro jet privado a recogernos :).

Yo no he ido a todas las ediciones del Canela pero, la última a la que asistí, fue precisamente la pasada. Antes decíais que el Canela es el festival donde las bandas van a ver al público y no al contrario . El pasado año, antes de ver a Delorean sobre el escenario, ellos vinieron a verme a mí. Yo estaba con unos amigos haciendo botellón en mi coche y el guitarra estaba dando vueltas. Se acercó y, al final, acabaron todos los del grupo con nosotros. El cantante pilló mi monopatín y se puso a hacer ollies al tiempo que sonaba la sirena de un coche patrulla de la policía local y, simultáneamente, una caravana recreaba en plena calle la pasada huelga de Limasa. En fin, eso no pasa en cualquier otro festival. Supongo que tendréis miles de anécdotas al respecto.
Has definido a la perfección lo que es el Canela. En ningún festival se ven cosas como aquí. La gente llega con el chip de la diversión y se entrega completamente a la fiesta. Es una pasada todo. Siempre decimos que tenemos el mejor público del mundo. Anécdotas hay muchas, como una pandilla de negros rutilantes llegando en un Hummer limusina, Bob Esponja bailando al lado de un coche de Policía o despertares travestidos al día siguiente en medio de un mercadillo.

Sé que hacéis fiestas de presentación del festival en otras capitales, como Madrid, con conciertos y pitote incluido, pero, ¿os habéis planteado la posibilidad de exportar literalmente el festival fuera u os han surgido ofertas al respecto?
Nos han propuesto llevarnos el Canela a Madrid, Barcelona o Valencia, pero tenemos bastante claro lo que tenemos y queremos. El año pasado King Khan incluso nos dijo que quería hacer un “King Khanela Party around the world”. El Canela es de Málaga y aquí se quedará, que por allí ya tienen mil cosas.

Y, ya para finalizar, una ráfaga de preguntas pensadas con el culo:

¿Os gusta a todos el arroz con leche? Si lleva canela, por supuesto.

¿Qué fue antes el dj o la gallina? El Camuñas.

¿Se puede pinchar metido en una piscina? Por supuesto que sí, en todos los sentidos.

¿Se pueden fumar canelos en el Canela? Fuera sí, dentro no. Que luego hay que dejar los disfraces aireándose.

¿Sabéis lo que es un poto además de una planta? Si es eso que estás pensando, claro.

¿Os gusta Camela? ¡Y a quién no!

¿Madrid o Barcelona? Madrilona

¿Os dice algo la estrofa Velvet que te quiero Velvet? Que sin el Velvet la música en Málaga sería una mierda.

Sin recurrir a Google, ¿os dice algo la expresión Cinnamomum verum? ¿Canela de toda la vida o qué pasa aquí?

¿Os habéis planteado hacer un concurso de culos mojados? Pues desde ahora ya sí. ¿Quieres participar?

www.canelaparty.com