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La historia del jazz sigue escribiéndose en estricto presente, aunque este género legendario ha sucumbido a todas las influencias imaginables para moldear sus melodías al ritmo de los tiempos convulsos que vivimos. Sin lugar a dudas, una de las estrellas más brillantes y vanguardistas de los últimos años responde al sugerente nombre de China Moses y su historia la emparenta de manera directa y visceral con la tradición sonora del profundo sur de los Estados Unidos. No en vano, su madre es la famosa cantante Dee Dee Bridgewater y su padre el reputado director teatral Gilbert Moses (también curtido en el género Blaxploitation de los años 70). Pero lejos de acomodarse en la tradición artística familiar, China Moses decidió emprender una carrera arriesgada y vertiginosa en busca de su propia voz, grabando álbumes tan bien recibidos por la crítica como “China” (1997), “On tourne en rond” (2000), “Good Lovin” (2004), “This One’s For Dinah” (2009) y “Crazy Blues” (2012). Actualmente se ha convertido por méritos propios en una de las jóvenes estrellas del jazz más aclamadas del panorama internacional gracias a su mezcla de tradición y modernidad, sin olvidar que presentó su propio programa de radio durante dos años y que es una autñentica celebridad televisiva en Francia.
El próximo 11 de noviembre actuará con su banda en el Teatro Cervantes de Málaga en el marco incomparable del Festival Internacional de Jazz y después protagonizará dos fechas únicas en Bilbao, junto a la orquesta sinfónica de la ciudad. Hemos tenido la oportunidad de conversar con ella antes de su breve gira española para conocer los secretos de su trayectoria, sus pensamientos en la carretera y la influencia que ha tenido en su vida personal una música centenaria como el jazz.
Empecemos por el principio de tu aventura musical: naciste en Los Ángeles en 1978, pero te criaste desde muy pequeña en París. ¿Cómo fue la experiencia de crecer en una gran ciudad europea en la década de los 80? ¿Cuándo descubriste tu pasión por la música?
He tenido mucha suerte de haber crecido en Europa. Siendo norteamericana, a veces resulta complicado captar la verdadera diversidad del mundo que nos rodea. ¡Muchos de mis compatriotas no viajan fuera de nuestro propio país porque es enorme! Pero tener la oportunidad de criarme en un lugar donde puedes descubrir otras culturas, otros idiomas y otros ritmos con un simple viaje en avión o en un breve trayecto en tren es algo que lo cambia todo. Además, estar tan cerca del continente africano es algo asombroso. Como afroamericana que soy, las preguntas sobre mis raíces aparecieron de forma inevitable. Sé que nunca tendré una respuesta completa, pero he logrado entenderlo mejor. Estar expuesta a tantas nacionalidades cuando iba al colegio era asombroso. La música está en mi sangre y es mi primer lenguaje, así que puedo afirmar que siempre he conocido la música. Y ahora se ha convertido en mi forma de vida, en mi religión y en la forma en que mejor me comunico. Siempre he tenido mucha curiosidad por los sonidos, pero al mismo tiempo he sido muy vergonzosa con mi talento.
Siendo tus padres artistas consagrados en una época tan convulsa de los Estados Unidos, ¿recuerdas si te hablaron de la conexión que existió entre el jazz y el soul con el movimiento por los derechos civiles?
Siempre he sido muy sensible y me educaron para ser una mujer independiente, pero sí que es cierto que mis padres usaron la música para promover la causa de los derechos civiles. Además, mi padre fue en 1963 uno de los fundadores del Free Southern Theater en Mississippi, con la intención de introducir el teatro en el profundo sur de los Estados Unidos. Por este motivo, ser negro y orgulloso es un hecho básico en mi familia. Porque el ser humano es lo que realmente cuenta y la música es como un altavoz para transmitir ideas y sentimientos. Y creo que necesitamos utilizarla más con esta finalidad.
Puede que fueras una de esas adolescentes que descubrió la magia del jazz a través de los samples que utilizaban los artistas de hip hop…
Descubrí el jazz al leer lo libretos y los agradecimientos de los álbumes de mis bandas favoritas: A Tribe Called Quest, De La Soul, Public Enemy, NWA y muchas más. Pero también he sentido curiosidad y he pasado horas escuchando música de distintas épocas, como Depeche Mode, Queen, David Bowie, Lionel Richie, Janet Jackson, Prince, Madonna, Millie Jackson, Bill Withers, Betty Davis, Meshell Ndegeocello, Queen Latifa, Neneh Cherry, Shirly Horn, Betty Carter, Marvin Gaye, U-Roy, Minnie Ripperton, Kate Bush y otros. Todos ellos han jugado un papel muy importante en mi vida y la influencia está en cada cosa que hago. Sin olvidar que el período de los derechos civiles en la música norteamericana es uno de los momentos más excitantes de la historia de mi país y se remonta hasta el blues más rural y sucio.
Has grabado cinco álbumes desde 1997. ¿Te atreverías a describir los caminos que ha tomado tu música en estos años? ¿Sentiste responsabilidad al editar “This One’s For Dinah” con el legendario sello Blue Note?
Como artista simplemente he evolucionado y no pienso demasiado sobre este tema porque creo que he encontrado mi propia verdad. Se trata de tener una voz propia y, evidentemente, no la tenía cuando empecé. Pero aún me queda camino por recorrer porque justo estoy empezando a conocerme a mi misma. El disco “This One’s For Dinah” se grabó antes de que mi productora lo cediera a Blue Note France para la distribución. Fue asombroso poder actuar por todo el mundo y, al mismo tiempo, cantar sobre mi artista favorita.
Aprovechando que mencionas el tema de las giras, ¿qué lugares te han marcado de una manera especial en tus viajes? ¿Has tenido la oportunidad de actuar en el profundo sur de los Estados Unidos donde nacieron el jazz y el blues?
Nunca que actuado en el sur de mi país, pero me gustaría hacerlo pronto porque tengo que visitar mi hogar, donde están mis raíces. Sin embargo, he actuado en Mali, Bangladesh, India, Letonia, Croacia, en pequeños pueblos de Francia y de Italia… y me he dado cuenta de que el mundo tiene una gran alma, pero también un pasado doloroso y un presente complicado. Cada concierto tiene una energía especial, aunque admito que mi gran momento fue cantar en la UNESCO el día internacional del jazz de 2012 junto a mi madre, George Benson, Tania Maria, Herbie Hancock, Marcus Miller, Ben Williams y muchos otros artistas. ¡Aunque en otro concierto también canté con Iggy Pop y mi banda es espectacular!
La gira actual te trae estos días a España. ¿Qué sorpresas puedes adelantarnos de los conciertos que ofreceréis en Málaga y Bilbao?
Interpretaremos gran parte de mi repertorio no publicado. Se trata de temas que compuse junto al productor inglés Anthony Marshall y el álbum no saldrá a la venta hasta principios del año próximo. Mi banda es de Inglaterra, yo soy norteamericana, pero me he criado en París, en el repertorio hay un poco de jazz, un poco de soul y mucho de mí misma como artista. Además, España es un lugar muy especial porque tengo una magnífica promotora (Plan B Music) que me ha mostrado lugares hermosos del país. Y pronto tendré la oportunidad de trabajar con una artista española. Ésta es la segunda vez que viajo a Málaga y estoy orgullosa de que el Festival Internacional de Jazz de la ciudad crea que su público querrá disfrutar con mi música.
Por curiosidad, ¿en qué fase se encuentra el álbum tributo a los hombres del blues, jazz y soul que estabas preparando?
Este disco saldrá en breve. Cuando estaba componiendo los temas con Anthony Marshall y sólo tardamos cinco días en dejar el disco escrito en mi apartamento de París, me di cuenta de que he aprendido mucho en la carretera, pero que también he estado escondiéndome en un lugar seguro. Hacer álbumes de tributo es un arte subestimado y el deseo de rendir un homenaje fue tan fuerte, que no pude alejarme de esa idea. El intestino de mi corazón susurró esas melodías y esas palabras a mi alma.
La última pregunta es la de ciencia ficción: si tuvieras una fabulosa máquina del tiempo, ¿a qué época viajarías y a quién te gustaría conocer?
Me encantaría tomar unas copas tranquilamente con Dinah Washington, Billy Strayhorn, Lena Horne, Peggy Lee y Mae West. Pero realmente debo confesar que estoy aprendiendo a disfrutar mucho el presente.
ENGLISH
CHINA MOSES. VANGUARD JAZZ.
The history of jazz is still written in present tense, even though this legendary genre has come under every influence imaginable, carving its melodies in the thrill of our days. Without a doubt, one of its most brilliant and vanguardist members today bears the evocative name of China Moses, and her heritage finds her in the core of the Deep South’s musical roots. Not for nothing was her mother the famous singer known as Dee Dee Bridgewater, while her father was the renowned theater director Gilbert Moses (who was very familiar with the genre of Blaxploitation during the 70s). Instead, however, of keeping herself within the boundaries of family tradition, China Moses decided to pursue a risky and vertiginous path, looking for her own voice. And in doing so, she has released very well received albums like “China” (1997), “On tourne en rond” (2000), “Good Lovin” (2004), “This One’s For Dinah” (2009) and “Crazy Blues” (2012). Nowadays, she has become by own merits one of the most internationally acclaimed young artists in jazz thanks to her mix of tradition and modernity. She also hosted her own radio show for two years and is currently a genuine tv celebrity in France.
On the 11th of November she will be playing along her band at the Teatro Cervantes, Malaga, with occasion of the unrivalled Festival Internacional del Jazz, after which she will play two single days in Bilbao together with the city’s symphonic orchestra. He’ve had the chance to talk with her before her brief Spanish tour to learn the secrets of her career, her road thoughts and the influence of jazz, a centenary music, in her life.
You were born in L.A, but grew up in Paris. How was it growing up in that European city in the 80’s and 90’s and when did you discover your passion for music?
I am very fortunate to have been raised in Europe. As American, it is sometimes hard to grasp true diversity of the world. A lot of us don’t travel outside of our own country because it’s so big. But growing up where another culture, language and other rhythms are only a quick plane or train ride away changes everything. Being closer to the African continent also is pretty amazing. As a black American the questions of roots inevitably comes up. I will never have the full answer, but that is ok. Being exposed to so many different nationalities in my school classes was mind blowing! Music is in my blood. It is my first language. I have known music always. It has become my livelihood, my religion and the way that I communicate the best. I have always been musically curious, but also very shy of my own talent.
Your parents were both artists. Did they talk about the connection between jazz and soul with the civil rights movement?
I have always been very sensitive and brought up to be an independent woman. My parents both have used music to further the civil rights cause. My father even was one of the creators of the “Free Southern Theater.” Being black and proud is a given in my family. It‘s the human being that counts the most. Music is a megaphone for thoughts and feelings and we need to use it more as that.
Maybe you were one of those teenagers who discovered the magic of jazz though hip-hop samples…
I did discover jazz through reading the liner notes of my favourite bands: A Tribe Called Qwest, De La Soul, Public Enemy, NWA and the list goes on. But I have always been curios listening to music for hours on end: Depeche Mode, Queen, David Bowie, Lionel Richie, Janet Jackson, Prince, Madonna, Millie Jackson, Bill Withers, Betty Davis, Meshell Ndegeocello, Queen Latifa, Neneh Cherry, Shirley Horn, Betty Carter, Marvin Gaye, U-Roy, Minnie Ripperton, Kate Bush and many more have played an important role in my life. The influence is from all around me. And the civil rights period of American music is one of the most exciting periods in our history from American to the down and dirty blues.
You have recorded 5 albums since 1997. How do you think your style has evolved in all this time? Was it a responsibility recording for Blue Note an album like “This One’s For Dinah”?
You just evolve. You don’t think about it. I have found my truth. My voice and it wasn’t where I started. But it will go further. I am just starting to get to know myself. “This One’s For Dinah” was recorded before my production company licenced it to Blue Note Records France. That was pretty amazing to tour the world singing about my favourite chick.
You have travelled a lot for your tours. Which places have been the most special for you and why? Have you ever played in the Deep South of the US, where jazz and blues started?
Never played in the south, but I will. I have to go home to my immediate roots. But at the same time I have played in Mali, in Bangladesh, in India, Latvia, Croatia, in tiny villages in France and Italy… the world is full of soul and painful pasts and difficult present times. Every show has a special energy. But I do admit singing at the UNESCO for the International Jazz day in 2012 with my mom, George Benson, Tania Maria, Herbie Hancock, Marcus Miller, Ben Williams and many more, that was a moment! Oh, but then again I also sang with Iggy Pop and my current band is pretty amazing!
The next tour is bringing you and your band to Spain. What kind of show are you going to play? Have you rehearsed anything special for this tour?
We will be performing my unreleased repertoire. Original compositions that I wrote and composed together with English producer Anthony Marshall. The album will be released at beginning 2016. My band is from England. I am from the US via Paris. There is a bit of jazz, a bit off blues and a bit of soul and a lot of me… Spain is a very special place for me because I have a wonderful booker (Plan B Music) and they have shown me this beautiful country. And one of these days I will have to work with a Spanish artist. This is the second time we will come to Malaga. I am proud that the Festival believes that their audience will be willing to discover my music.
Are you still working on the album-tribute to the men of blues, jazz and soul? What can you tell us about its recording and when is it going to be released?
That album will come one of these days. I realized while writing my songs with Anthony Marshall (the album was written in 5 days in my home in Paris) that I have learned a lot on the road and I have also been hiding in plain site. Doing tribute albums is an underestimated craft. And the desire to pay homage in another way became so strong that I could not turn away from it. The gut of my heart whispered theses melodies, these words to my soul.
The last question is the science fiction one: if you had an incredible time travel machine, where and when would you go? Who would you like to meet?
I would love to kick back some brinks with Dinah Washington and Billy Stayhorn, Lena Horne, Peggy Lee and Mae West. But in all truth I am teaching myself to be in the present.
www.chinamoses.com