Un año más, el Culoactivo Canela presenta el gran pitote del verano: el CANELAPARTY. El festival afronta su décima edición consecutiva y, para celebrarlo, han decidido preparar un ALL STAR con las bandas más representativas de las pasadas nueve ediciones, además 4 novedades. Nombres como King Khan and the Shrines, Delorean, Airbag, Nueva Vulcano, Toundra, Mordisco, Joan Colomo, Me and the Bees, Sen Senra, Juventud Juché, Atención Tsunami y Futuro Terror componen el flamante cartel.

Un festival de música en el que los asistentes, los grupos, los niños y hasta los perros se disfrazan y pugnan por lucir el atuendo más original mientras son sepultados por una auténtica avalancha de confeti. Aprovechamos esta décima edición para charlar con sus organizadores y desearles muchas felicidades por estos primeros 10 años de vida tan bien llevados. 

Cuando empezó el Canela en 2007, ¿os veíais llegando a una 10ª edición?
El primer Canela empezó a fraguarse solo unas semanas antes de su celebración, fue todo muy rápido. Siempre contamos que el germen del Canela fue la banda The Skirmish Society, que tocaba todos sus conciertos disfrazada y tirando confeti. La propia banda, en la que tocaba uno de los organizadores, decidió invitar a un par de grupos amigos a hacer lo mismo: tocar disfrazados. Y se extendió esta premisa al propio público. Junto con estas bandas y la incorporación de buenos amigos habituales en la organización de conciertos en la ciudad, la cosa se fue yendo de madre y el primer Canela contó con 9 directos en un solo día. Fue todo muy punk (y a mucha honra ¡eh!), algunos organizadores vieron la sala por primera vez el día del evento, hubo muchos fallos, pero fue jodidamente divertido. No todo el mundo vino disfrazado, pero el porcentaje fue bastante alto. A día de hoy creo que nadie se atreve a ir al Canela sin un buen disfraz.
Que en unos días estemos celebrando la décima edición era algo impensable entonces (incluso llevar a cabo una segunda ya nos parecía improbable), pero creo que todos coincidimos en que es una de las cosas más bonitas que hemos hecho en nuestras vidas. Solo quedan dos de los organizadores de aquella primera locura, pero estamos eternamente agradecidos a todos los que han formado parte de su conceptualización o su evolución, que son muchos.
Es reseñable que enfocamos esa primera edición como una excusa para traer a Corea y, curiosamente, este año estarán Futuro Terror, con antiguos miembros de Corea. Nos gusta pensar que es como cerrar el círculo. Todos hemos ido evolucionando, pero al final siempre nos vamos a encontrar, de una forma u otra.

¿Qué ha cambiado desde aquella primera edición?
El concepto y la finalidad siguen siendo los mismos: pasarlo de puta madre. El espíritu festivo, el carácter ritual, la cercanía entre banda y público… Las ganas y la ilusión por nuestra parte para seguir manteniendo la originalidad huyendo de fórmulas. Eso sí, han cambiado otras muchas cosas. La inicial tendencia “hardcoreta” pronto se dejó de lado para abrazar todo tipo de estilos musicales. Girar hacia el concepto de fiesta fue fundamental. Nos ha hecho crecer mucho más que si nos hubiésemos quedado estancados en un festival de un sólo estilo. Durante estos años hemos visto en el Canela a gente que nunca hubiéramos imaginado. Se han incluido artistas internacionales, el festival pasó de uno a tres días con fiesta de disfraces para niños y mascotas incluída, ha aumentado el público tanto local como nacional e incluso internacional y, por último, cada año intentamos ser más profesionales que el anterior, lo que no es fácil, pues todos los organizadores trabajan en otro tipo de sectores y entienden el Canela como una afición (eso sí, algo estresante jeje). Si en la primera edición dedicamos unas semanas al asunto, desde hace años estamos trabajando en el Canela el año enterito. Para ser un hobby, hemos evolucionado bastante bien (aunque siempre siendo conscientes de que todo es mejorable). No es fácil, pero joder, hemos llegado a la 10ª edición, algo bueno estaremos haciendo ¿no? También nos gustaría destacar que cada año el nivel de los disfraces sube un montón tanto en concepto como en realización, dando vida a auténticas obras de arte. Pura creatividad.

¿Cuál ha sido y sigue siendo vuestra filosofía?
Nuestra filosofía siempre ha girado en torno a la diversión. No sacamos pasta del festival a pesar de la cantidad de horas que le dedicamos. Empezamos esto porque queríamos pasar un buen rato con los amigos y ese círculo de amigos se ha hecho cada vez mayor. El Canela pretende que por una noche, o varios días, la gente olvide un poco sus problemas y se lo pase lo mejor posible. Que se rían un poco de ellos mismos, que no se preocupen por aparentar esto o aquello y vayan dando todo el asco posible, jaja. Seguiremos eligiendo a las bandas atendiendo a gustos personales, independencia que es un gustazo. Nos motiva especialmente poder hacer cada año un cartel diferente y que no sean calcos de otros años u otros festivales. En 9 ediciones sólo hemos repetido 2 bandas y exclusivamente por motivos especiales (último concierto o concierto reunión). Así que este año y solo por ser la décima fiesta, nos hemos permitido el gustazo de traer a muchas de las que tocaron en años anteriores. Ojalá hubiésemos podido traer a todas, pero claro…

Momento o momentos claves en estos años.
Podríamos escribir un libro con anécdotas o momentos mágicos del Canela. La actitud de la gente es una pasada. La mayoría ya sabe que esto no es un festival al uso. Requiere algo más. El punto de inflexión fue definitivamente en 2009 (año en que tocó Delorean, que vuelven para la décima edición). Guardamos con especial cariño en el recuerdo la despedida de la banda local Notes to Myself, la actuación de Dan Deacon (vaya puto fiestón), el show de marionetas de Quintron & Miss Pussycat, Brooks de los Growlers comiendo confeti o las caras de felicidad de Metz sobre el escenario. Joder, ¡ha habido tantos conciertos tan buenos! Entre una cosa y otra, todos los años se escapan lágrimas de felicidad por ver lo que hay montado ahí. El MiniCanela con perros y niños disfrazados es magia y las actuaciones de baile de los últimos dos años fueron una pasada. Es genial ver disfrutar a los más pequeños y que los padres tengan oportunidad de hacer cosas con ellos en esos ambientes. En cuanto al público y sus disfraces, es complicado elegir: la entrada de los tronos en 2011 (sin duda un antes y después en toda la parafernalia), los “Negros rutilantes” apareciendo en una puta limusina con un rap grabado por ellos mismos expresamente para la ocasión, una pelea de “Pressin Catch” en directo con su cuadrilátero incluído… Este año se avecina una buena, señora.

Planes de futuro.
Aunque los festivales siempre han de tener la mirada puesta en la siguiente edición, ahora mismo estamos centrados en la actual. Sí es cierto que ya hemos hablado algunas cosas que nos gustaría que pasaran el año que viene, pero nos queda mucho por hacer en este. Lo único que tenemos claro es que queremos seguir manteniendo nuestra filosofía independiente, ir de cara y traer a las bandas que nos gustan para pasar el mejor fin de semana del año, dar un pasito más como cada edición y seguir conociendo nueva gente, que al fin y al cabo, es por lo que merece la pena de todo este tinglado.

Bandas que os gustaría que pasaran por el CanelaParty en los próximos años.
Habría tantas que nos gustaría que viniesen al Canela… La verdad es que ya hemos cumplido sueños con algunas de las que han venido. Pero como siempre es bueno seguir fantaseando con grandes cabezas de cartel: Hot Snakes, Thee Oh Sees, Rocket from the Crypt, Ty Segall, Allah Las, Les Savy Fav, The Murder City Devils, Cave In, Deerhoof… Y en cuanto a bandas nacionales también hay un buen puñado muy “canelables” pero tampoco vamos a dar más pistas, jaja.

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