Creció bajo la influencia del skate y la cultura punk. Comenzó manifestando su espíritu rebelde a través del graffiti en la calles de Lisboa, pero más que rebeldía lo suyo es un modo de vida reivindicativo y coherente con sus propias ideas. Consciente de su corriente de seguidores, sólo intenta ser una buena influencia y despertar el carácter crítico de las personas poniendo cosas en perspectiva. Sentirse atascado (STUCK) en un momento de su vida le empujó a salir, viajar y, sobre todo, ser feliz con lo que hace… Stuck es genuino.
Me llamo Bruno Garrudo, pero casi todos me conocen como STUCK, que es el nombre artístico que uso desde que empecé a pintar en las calles de Lisboa. Aparte de eso, también hago fotos, escribo, viajo y, más que nada… surfeo.
Cuando era niño patinaba, surfeaba y hacía todo tipo de actividades creativas. De repente empecé a pintar graffitis y, gracias a ellos, comencé a viajar, hacer fotos y a escribir. Hoy en día hago un poco de todo.
Mis creaciones son una parte de mí mismo que está en constante evolución. Tengo siempre ideas nuevas y proyectos que siento que he de materializar. Es tan sólo una manera de expresar una parte de lo que soy. No soy una persona muy habladora así que lo compenso mediante la habilidad y pasión que pongo en todo lo que hago en mi vida. Si lo tuviera que describir con una sola palabra diría que mi trabajo es “genuino”.
Hay muchos mensajes escondidos y significados ocultos en todo lo que hago, pero al final tan sólo estoy siendo yo mismo. La verdad es que no intento conseguir nada más allá de ser feliz y encontrar el equilibrio. Cuando era más joven quería cambiar el mundo, hacerlo un lugar mejor. Sé que es algo muy cliché pero cuando eres joven tienes toda esa energía y necesitas canalizarla de alguna manera. Antes era mucho más político, ahora mi mundo ha cambiado a causa de ello. Intento ser una buena influencia para los que siguen mi trabajo y eso les hace preguntarse cosas y cuestionarse a sí mismos. Tan solo pongo cosas en perspectiva.
Creo cosas nuevas, frescas y profundas. No me gusta la superficialidad. De alguna u otra manera mis experiencias personales influencian mi vida y mi trabajo. Me inspira la naturaleza, la música, la astronomía, la arquitectura, los niños… todo. Crecí escuchando punk durante mucho tiempo. Era todo lo que escuchaba, pero con los viajes empecé a disfrutar de los ritmos, los instrumentos y la música autóctona de los lugares a los que iba. Por ejemplo no tiene mucho sentido escuchar a Pennywise cuando estas en mitad de la jungla. En esas ocasiones la naturaleza pone su propia banda sonora, los ruidos de los animales, la lluvia, las olas… son maravillosas. Pero si hablamos de lo que me inspira, en imágenes, algo idílico es un pico perfecto sin gente. Creo que no hay ni habrá nunca una imagen que me motive y fascine más que esa.
Mi opinión sobre el arte es bien clara, tiene que estar en todas partes! Para mí empezó en las calles porque era la única plataforma que tenía disponible, los muros eran mis lienzos. Ahora también muestro mi trabajo en galerías e intento hacer el camino contrario y volver a la calle, pero usándolas como una galería en condiciones. La gente tiene que entender que el arte pertenece a todos. Puede ser un libro, un coche, una casa o un simple dibujo, lo que cada persona crea que de manera artística definirá su cultura. Es tu herencia. Históricamente es el aspecto más importante que define nuestras vidas, por eso le doy tanta importancia.
Aunque también se la doy a otras muchas cosas, como el surf. Desde que era niño y vi a alguien bajar una ola grande, mi vida cambió para siempre. El surf ha definido cada aspecto de mi vida y seguirá haciéndolo para siempre.
www.stucksomewhere.org