Camera Life: Justin Borucki

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Camera Life: Justin Borucki

4 July 2013 Texto: Isa Alba. Fotografía: Justin Borucki. Cover: Indecision (1997).

Son incontables los artistas que Justin Borucki ha contemplado a través de su objetivo. Es fichaje de prestigiosas discográficas e insignes cadenas de televisión, pero a nosotros realmente nos tiene cautivados por ser uno de los fotógrafos más especiales del underground neoyorkino de los 90. “Mi pasión es crear y colaborar con la historia visual de la música, aportar mi visión”.

Cuesta trabajo encontrar adjetivos que definan el trabajo de este fotógrafo de Nueva York. Muchas han sido sus influencias a lo largo de los años, porque muchas son las cosas que ha visto acontecer a su alrededor. Lo que está claro es que sus fotos están llenas una intensidad inclasificable. “Es difícil describir mis fotos. Muchas cosas han cambiado durante los años (intereses personales, etc.). Cuando empecé quería ser fotógrafo callejero. y vender fotos en galerías. También tenía un gran interés por la foto-ilustración, y pensaba que intentaría ganarme la vida haciendo portadas de discos y libros y cosas así”. Y no es algo que dependa del estilo al que se tenga que enfrentar, como bien afirma él mismo: “En cuanto a la fotografía musical, mi estilo es versátil pero muy identificable al mismo tiempo. Independientemente de que haga fotos para revistas de hip hop, de metal o de rock y, aunque enfoque las personas y la iluminación de diferentes formas, se nota mi estilo”.

Silent Majority 1995

Por capturar momentos inolvidables del hardcore y punk de Long Island, por testificar con sus imágenes una escuela guiada por bandas como Indecision, Die 116, Milhouse, Mind Over Matter, Silent Majority y muchas más. Y pensar que todo empezó de forma casi fortuita, fotografiando conciertos y haciendo colaboraciones en fanzines de amigos. “Cuando tenía quince o dieciséis años iba a clases de fotografía para llenar los huecos libres que me quedaban en el horario del instituto. Antes no había tenido ningún interés en ello, pero me enamoré instantáneamente. Empecé sacando fotos en la escena hardcore y punk, simplemente para contribuir con la comunidad. Echado la vista atrás, ojalá hubiera hecho reportajes. Pero por aquél entonces no tenía dinero, y a menudo lograba hacerme con un carrete para alguna que otra noche” . Una vez más hay que dar las gracias a los caprichos del destino, que hicieron que Justin se decantara por la fotografía para ocupar las horas muertas de su formación académica cuando tan sólo era un adolescente.

Ha llovido un poco desde aquellos noventa, y ahora Justin fotografía artistas del más alto nivel, algún paisaje que le inspira o a su amada Nueva York. Pero aún así, no se le caen los anillos en lo que concierne a formatos . “No tuve problemas cuando tuve que pasarme al digital. Cuando tiraba en carrete siempre me faltaba tiempo para sacar todo en el cuarto oscuro. Tenía que alquilar una impresora, y nunca estaba satisfecho con los resultados. Tirar en digital me ha devuelto todo el control”. De hecho, incluso ha decidido atreverse con otras técnicas. “Hace poco decidí aprender el procedimiento del colodión húmedo. Es un proceso muy meticuloso y hecho a mano que se desarrolló en los años 1850. En este proyecto pretendo explorar y examinar mi relación con mi Nueva York, de la que soy originario, y mi actual hogar en un bosque al sur de New Jersey. El concepto aún tiene que definirse mejor, pero primero necesito ponerme las pilas con el colodión húmedo. Me gustaría incorporarlo a mi flujo de trabajo cotidiano, y poner a la venta más impresiones artísticas. La fotografía es mi única fuente de ingresos. Hace poco abrí una web store en la que hay impresiones a la venta”.

Wilco 2011

Sus inspiraciones fluctúan tanto como los retos que se propone. “Obtengo inspiración desde muchos sitios diferentes. Algunas veces basta con un objetivo o una cámara nueva, o incluso un filtro de hipstamatic (iPhone). Siempre estoy mirando y observando a mi alrededor”. Unos de sus desafíos más llamativos fue su proyecto 365 en Flickr, todo un ejemplo de superación creativa. “Hace algunos años hice un proyecto 365 en Flickr , en el que mi reto personal era sacar una buena foto cada día sin contar las que hacía por trabajo. Fue muy difícil una vez pasado unos meses, pero la experiencia fue increíblemente enriquecedora a la hora de modelar mi propia visión”.

Justin tiene las cosas claras, y sabe que la fotografía seguirá ocupando el resto de sus días. “Fotografiar música siempre ha sido mi constante. Nunca he parado de hacerlo desde que me llevé la cámara a un concierto a principios de los 90, y nunca lo haré. Además, durante los últimos años, han habido nuevas experiencias que han hecho que este oficio siga siendo interesante”.