Escapada a Sagres

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1 August 2023 Texto: Roo Tirado. Fotografía: Juanjo M Fuentes.

Hemos pasado un fin de semana en Sagres, donde nos hemos alojado en el gran hotel Memmo Baleira. Un hotel donde al entrar sientes relajación y bienestar. Con vistas al mar, piscina exterior climatizada, escuela de surf y clases de yoga; estaba todo preparado para que no tuvieses que salir de allí practicamente, je, je. Los desayunos ofrecían gran variedad para combinarlos a tu gusto, y así coger fuerzas y empezar el día. Entre estos destacan los pasteles de belem, nos encantaron.

En pocos días hemos hecho un recorrido intenso, dos días de curso intensivo de surf con Free Ride Surf Camp, la primera escuela de surf de Sagres. Levantarnos a las 9 de la mañana para calentar en la playa y después meternos al agua, ha sido muy satisfactorio. Dos de los monitores, Hugo y Tatiana nos dieron la bienvenida y son de los mejores profesores de todo Portugal. ¡Que fácil es aprender surf cuando la paciencia y empatía priman en sus cuerpos!

Memmo Hotel

Aprender surf con profesionales de tu lado es más fácil. El trato de la escuela ha sido genial; Hugo, nuestro gran coach, nos ha aconsejado en todo momento y ha hecho del surf una experiencia muy satisfactoria. «Calma, mira la ola, date cuenta de cuando golpea tu muslo, el mar manda, tienes que dejarte llevar, …» estas son algunas de las frases con las que Hugo nos hizo sentir el mar.

Las tardes eran ocupadas por el yoga. Una sala espaciosa con vistas al mar y música relajante. Sin duda es el mejor lugar para desconectar de la rutina.

Freeride Surf School

El ambiente surfero se hace con la pequeña villa. Visitamos varias tiendas de surf como Retro Sailor, Surfer Lab o Surf Planet, más especificas para el mundo del Surf y Sulf Culture dónde podías encontrar gran variedad de marcas y tablas de surf de diseño.

Como guinda del pastel, Restaurante Carlos es el sitio ideal para las comidas y cenas. Es el restaurante de cita obligada en Sagres, una buena carta de vinos, carnes y pescados y una decoración playera llena de color hacían de la cena una experiencia. Carlos, el dueño, nos recibió con las manos abiertas preguntándonos que tal habían sido las clases de surf. Nos hizo una buena selección de platos.

Restaurante Carlos

Visitamos las distintas playas de alrededor de Sagres en busca de promesas del surf y body.

Habría sido imperdonable no visitar Cabo San Vicente. Como suele ser habitual en este punto tan expuesto, soplaba un viento bastante desagradable. Una buena chaqueta, y listo. Tampoco nos olvidamos de sitios tan bonitos como Cordoama o Garrapateira, Arrifana…

Sin duda, el fin de semana perfecto para amantes del Surf, la naturaleza y una gastronomia de ensueño.