El hermano pequeño, Will Butler, sigue creciendo y nos entrega con su “Generations” (Merge Records / Everlasting) el tercero y más completo de sus discos en solitario. Una especie de novela, según él, que se enfrenta de llenos a los principales problemas de la vida y que al mismo tiempo mira de lleno al futuro y a lo que dejaremos a las siguientes generaciones. Además de cuidar de sus tres hijos ha tenido tiempo para estudiar temas políticos y esta mezcolanza sale despedida en ricos temas con algunos momentos más que destacados aunque el disco y el ritmo tenga algún altibajo que otro.
Es inevitable acordarse de Win Butler y de sus Arcade Fire en algunos momentos, pero eso no es en absoluto nada negativo. Parece que ha nuestro Will le encantaron los resultados del rico “The Reflektor Tapes” y sus todavía vigentes reflejos surgen en algunos temas de este más que interesante y recomendable “Generations”. Inicio por todo lo alto con sus voz a punto de desgarrarse y un buen montón de mullidos teclados y arreglos a los que luego se suma un ritmo casi cercano al roll EDM. Casi funk sintético para un tema que encajaría a la perfección en “The Reflektor Tapes”. Sigue la eléctrica, intensa y guitarrera ‘Bethlehem’ también con ecos a su gran banda. Me encanta ‘Close My Eyes’ y si cerramos los nuestros parece que podamos escuchar al Brian Ferry más elegante de los tiempos de “Avalon” o a los primeros Aztec Camera. Preciosa melodía, por cierto. En ‘I Don’t Know What I Don’t Know’ se nos muestra con sintetizadores y guitarras enérgicas y explosivas que le hacen sonar hasta rabioso por momentos. Contrasta con los tonos alegres y los rítmicos coros de ‘Surrender’. En la juguetona y hermosa ‘Promised’ se acerca, hasta en la voz, al Bowie de finales de los 70. Deliciosa introducción al piano en ‘Not Gonna Die’ que luego se torna apoteósica con vientos y coros grandilocuentes que otra vez nos llevan a Arcade Fire. Finaliza con ‘Fine’ y su aire a jazz antiguo. Su voz y su piano nos remiten a Randy Newman, aunque luego llegan buenos coros femeninos y algo más de épica bien entendida. ¡Pues eso, el hermano pequeño cada vez se hace más grande! (8’5)
Merge Records / Everlasting