¡Todos a sus trincheras, que llegan The Oddballs y su Tank Rock! Estos viejos kamikazes de la escena malagueña no inventan nada con sus nuevas andanadas musicales. Pero como han cogido el nombre del sargento que encabezaba a “Los Violentos de Kelly” y estos eran una violenta e incontrolada patrulla del ejército han decidido llamar “Tank Rock!” a su aleación en metales fundidos de garage-punk, r’n’r, frat-rock y punk-rock de toda la vida.
El grueso de la banda surge de los extintos Puño Americano & His Puñettes y el sonido sigue por dichas coordenadas salvo por la mayor presencia que adquiere ahora el saxo de Dani Drunko en muchos momentos del disco. Las voces (muy) “cantantes” las siguen llevando Mario y Dani y a las percusiones alocadas y berridos varios de Juanillo se han sumado ahora la potente y eficaz sección de ritmo formada por Jose y Javi. Solo les faltaba fichar por un sello discográfico con gente de su calaña y ese no ha podido ser otro que FOLC Records, el sello de los “Grandes” Los Chicos. Encima el artwork es una gozada absoluta a cargo de Moose Malloy con colores azules para la edición en compacto y naranja para el flamante vinilo. ¡Te tendrás que hacer con los dos formatos para evitar futuras especulaciones de coleccionistas!
Es evidente que bandas como Los Chicos u otros compañeros en FOLC Records como MFC Chicken, A-Bones, Wipers, King Curtis, Los Mambo Jambo, Ray Collins Hot Club Band, Terbutalina o King Salami están entre sus alocadas coordenadas musicales. Abren fuego con el rotundo single, “Last song”, con las guitarras de Mario y el saxo de Dani listos para la fiesta. Cuelan guapos estribillos aquí y allá como los de “Dead deers” o “We are The Oddballs” ideales para que Juanillo meta sus berridos y arengas a la parroquia. “Bongos & fireball” es el tema mambo-punk para que se luzca el amigo Juanillo y para que la fiesta vaya para arriba. Cierran la cara A con su lado más pop y sixties y los magníficos coros y voces de “Lonely star”. Por cierto que esta última abre el breve capítulo de versiones con sus dos dispares pero muy eficientes muestras. Este garage-pop es de Los Saicos y también nos dan la matraca más agresiva con el “We sound amazing but we look like shit” que tituló el anterior LP de Los Chicos. En la cara A tiene más protagonismo el saxo de Dani y por eso predomina la voz de Mario y en la cara B ocurre a la inversa. Así abren la cara B con un “Slowly killin’ me” que roba el arranque de bajo al “Psycho killer” de los Talking Heads. Tras su himno de directo, “We are The Oddballs” se marcan también un puntazo de tema en castellano como “No sé bailar” con letra divertida a tope. Acaban la fiesta y la borrachera con un “Whiskey a Go-Go” alcoholizado con nuevos coros majaras y el saxo echando humo. ¡Fiestón de “Tank-Rock’n’Roll!. (8,5)
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