Decir que The Bobby Lees es una banda de garage punk-rock es una simplificación bastante lógica. Me gusta más cuando se habla de crazy-punk, punk blues o skiffle punk para enfermos mentales. También la definición que hace de ellos su fan, Debbie Harry, que habla de minimal proto slash punk. No es la única veterana que les admira pues Henry Rollins e Iggy Pop también les siguen desde sus comienzos. Además su disco anterior fue producido por otro seguidor de postín como Jon Spencer y lo finalizaron con dos sorprendentes y logradas versiones del ‘I’m A Man’ de Bo Diddley y el himno punk ‘Blank Generation’ de Richard Hell. ¿Qué, todavía no estás deseando conocerles?
Pues tus dudas se disiparán si escuchas este tercer disco y primero para Ipecac Recordings tras que su fan Henry Rollins se los presentará a Mike Patton y compañía. En la producción otra prestigiosa firma como es la de Vance Powell que ha trabajado con Jack White, Chris Stapleton, Bleached o The Raconteurs. Sam Quartin es una brutal cantante y una front-woman heredera de las mejores. Kendall Wind tiene gran protagonismo con el bajo y añade algunos guapos detalles con variados teclados. Los punteos de Nick Casa son para disfrutarlos más en directo. Por último, el ritmo de la batería de Macky Bowman es incansable aunque también sabe poner la pausa o los matices en temas que se alejan del punk y que son algo más que excentricidades marca de la casa como sucede con la boutade ‘Strange Days’ que pudiera firma PJ Harvey o con un ‘Little Table’ cargado de buen swing. Antes abren con el tema del manicomio ‘Bellevue` y furia en la voz y crujientes guitarras sobre rompedor ritmo. Solo dura 1 minuto y 21 segundos pero pudiera durar la mitad pues tiene un parón en el medio que parece ya el final. ¡Estos en directo tiene que ser la ostia! Van más veloces aún en un ‘Ma Loves To Drink’ con guitarras lo-fi y un bajo súper presente. Brutales redobles, efectivos riffs y hasta concisos punteos, así como juegos con otras canciones en un ‘Death Train’ que podrían haber firmado los primeros The Damned. En ‘Dig Your Hips’ se marcan un rabioso dueto vocal de menso de 2 minutos. Flipo con una ‘Monkey Mind’ que parece una mezcla imposible entre las Sleater-Kinney y los Beastie Boys. Salvajes punteos, velocidad y rabia en una ‘Greta Van Fake’ en la que dan cera a ese grupo imitador de los Led Zeppelin que todos conocemos. ‘Be My Enemy’ habla desde su título y tiene un estribillo cojonudo y es otro de los temas que más destacan. Acaban con otra locura marca de la casa titulada ‘Mystery Theme Song’. Con este tercer disco aumentarán el número de músicos fans famosos, pero también el de público en general. ¡Están en su mejor momento y que sigan así!
Ipecac Recordings / Rarely Unable