El insulso nombre de la banda no hace justicia a muchas de las interesantes letras de esta banda con espíritu de Vallekas. Este es su cuarto disco y lo suyo es el punk-rock más clásico que va de La Polla Records a Dead Kennedys, pasando por La UVI o MCD. Al frente está la voz y las guitarras de Matrako que ahora está muy bien secundado por los divertidos coros de El Paki Superlatero. Tiene el disco una magnífica presentación que se mueve entre imágenes anticlericales y homenajes a los Dead Kennedys de Jello Biafra. Engloban sus 17 nuevos temas en dos grandes bloques sobre cultura y política. Luego entra también por ahí literatura y, sobre todo, religión y ejército.
Esa temática sobre uniformes se pasea por temas como “Los ultracuerpos”. La religión, con Dios y el dinero, se pasean por un tema acústico como “Él” que lleva la huella de Social Distortion. Antes en “Punk love song” nos recuerdan a La Polla o los Gatillazo como también sucede en “Mu profesional” con una melodía demasiado deudora del “Txus” de los de Evaristo. “Fuego” es puro vitriolo con una letra llena de ironía y crudeza, pero también interesante. Se meriendan el “Viva Las Vegas” de Pomus y Shuman, pero popularizado por Elvis Presley, aunque la hacen vía los Dead Kennedys y la convierten en “Viva Vallekas”. La provocación de “Madrefoca” y sus contagiosos coros también son otro buen momento. También enfocan con crudeza pero con acierto temas como el de los refugiados y el racismo en “Los malos” y otros momentos. En “El monstruo azul” y otros momentos también nos muestran su pasión por el debut de The Clash o Damned. ¡Tienen su punto y si te gusta el punk-rock más clásico y peleón seguro que te lo pasas de miedo con ellos sobre un escenario!. (7)

Ponzoña