Veníamos gozando disco tras disco con el cuarteto de Brooklyn desde el estupendo “Light Up Gold” con el que les conocimos hace 3 años. Han seguido con su ritmo frenético de discos y también con el de actuaciones. Pero lo mejor para comprobar su valía era verlos en directo y lo acabamos de hacer este mes de junio y ya podemos corroborar que son toda una realidad y que van a superar a bandas más perecederas como The Strokes.
Quizás han ido muy rápido con 5 discos más que apreciables de lo que ellos denominan “Americana Punk” en menos de un lustro. Es una buena etiqueta para ellos y lo que hacen. Así les comparan con clásicos punk como The Clash con acercamientos al garaje y a clásicos como The Velvet Underground, Sonic Youth o Pavement.
Tras fichar por Rough Trade, prestigioso sello distribuido aquí por Everlasting Records / Popstock!, llegó el estupendo “Sunbathing Animal”. Tras un leve patinazo o precipitación con el deslavazado “Monastic Living”, recuperan garra y nervio con un fantástico “Human Perfomance” lleno de jugo y con toda la frescura del mundo aún en sus venas.
Comienzan con el ritmo y las guitarras de Sonic Youth y la Velvet en “Dust”, pero con los teclados de los primeros Talking Heads. El tema titular es una gozada melódica con un estribillo más contundente que sí que bebe de The Clash y los primeros The Jam. También bajan al garaje con “Paraphrased” y sorprenden con la calma de “Steady on my mind” que me recuerda algo a The Feelies. “One man no city” es el tema más largo y se va por encima de los 6 minutos pero no aburre en absoluto y tiene unos guitarrazos a lo Pavement que son una gozada. “Berlin got blurry” es otro más que posible single con otra contagiosa melodía. Casi al final llega lo mejor con la rabia y la urgencia punk, respectivamente de “Two dead cops” y “Pathos Prairie”. La desganada voz de Andrew Savage le va como anillo al dedo a su sonido y actitud. La anécdota la pone la guitarra de Jeff Tweedy en un par de temas, pero te recomiendo que los escuches tú mismo y, sobre todo, que vayas a verlos en directo, porque valen realmente la pena. (9)

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