Siempre volvemos con buen sabor de boca de Lisboa, ciudad de la luz y del mar, donde conviven en armonía la tradición y la modernidad.
Lo mismo nos pasa con el NOS Alive, si algo volveríamos a destacar de este festival es su boa mistura en todos los aspectos: un cartel variegado y multidisciplinar que en cuanto a estilos musicales abarca desde el rock al fado, unas bandas de primera línea repartidas en varios escenarios, una organización impecable en todos los aspectos y muy amable con la prensa, desde luego trata de un festival para amantes de la música en un entorno mágico donde el público asistente desprende buen rollo.
El festival NOS Alive ha cerrado su duodécima edición en la madrugada del domingo 14 de julio con la actuación de Pearl Jam, colofón final de una manifestación récord de 165.000 asistentes, donde fueron aproximadamente 50.000 por día.

El público, ha podido disfrutar durante tres días de más de 100 espectáculos de diferentes estilos musicales e incluso de una variegada oferta gastronómica, aunque los protagonistas sin lugar a duda han sido las grandes bandas internacionales, entre ellas destacaríamos los shows de Franz Ferdinand, Pearl Jam y MGMT, bandas que desataron la locura el sábado.
Pasaron por el escenario principal Artic Monkeys, cabeza de cartel del jueves, primer día, y también Snow Patrol, Queens of Stone Age, The National o Alice in Chains.
Personalmente iba con la idea de querer escuchar muchas de las grandes bandas Grunge de los ‘90 y revivir todos esas sonoridades que acompañaron mis años de tee nager así que para mí fue muy emocionante poder escuchar en vivo grandes hits de Alice in Chains como Would? o Rooster. Su concierto fue muy profesional y con un sonido perfecto, sin embargo seguimos recordando con melancolía su antiguo vocalista Layne Staley.

Otro grande concierto del jueves fueron sin lugar a duda Nine Inch Nails. Todo el público entonaba sus grandes clásicos como Wish, Closer o Hurt junto a Trent Reznor. Su show siendo arrollador desde el primer minuto, con un sonido perfecto, unas video proyecciones muy impactantes y muchos momentos especiales como la versión I’m afraid of americans de David Bowie.
El segundo día fue dominado por Queens of the Stone Age. No faltaron en su exhibición grandes clásicos como No one knows o Go with the Flow. Josh Homme se dirigió varias veces al público entregado a su banda, para agradecer su complicidad.
Siempre el viernes pudimos disfrutar de Black Rebel Motorcycle Club, Eels, Yo La Tengo y de Two Door Cinema Club, justo después de la actuación de QOTSTA.

Sin lugar a duda el plato fuerte de todo el festival fue la actuación de Pearl Jam, alguna parte del público fue casi exclusivamente para disfrutar de su largo concierto, que monopolizaba gran parte de la noche del sábado y que había colgado el cartel de sold out hace meses. Pearl Jam siguen muy en forma sin importar el paso de los años, tocaron durante más de dos horas que se nos hicieron cortas, temas de todos sus discos como Better Man, Even Flow, Given to fly, Jeremy o Black.
Cerraron la edición 2018 del NOS Alive invitando al escenario a Jack White para interpretar Rockin’ in the Free World, el clásico de Neil Young que ya es fijo de los setlist de la banda. Además de la colaboración con el ex The White Stripes, esa misma noche Vedder también había intercalado su tema Porch con el siempre efectivo riff de Seven Nation Army. Lejos de ser la única versión de la noche, la banda homenajeó también a Pink Floyd con Interstellar Overdrive y Comfortably Numb o John Lennon con Imagine.
El colofón final fue para mí fue el breve pero intenso y emotivo concierto de At the drive in. Algo cabreados por la duración excesiva del concierto de Pearl Jam, que habían prohibido que otras bandas tocaran durante su concierto, lo dieron todo en poco más de 20 minutos. Su carismático frontman Cedric Bixler hizo que todo el público del escenario Sagres estuviera entregado, casi echando la carpa abajo, yo misma me eché al ruedo del mosh con un puñado de sus clásicos de su álbum Relationship of command como One armed scissors, Arcasenal o Sleepwalk capsules.
Con toda esa energía ya tenemos ganas de que llegue el próximo verano para volver.







