Déjate arrastrar por los delfines.

Esta es la segunda vez que entrevisto a Jamie. En la anterior ocasión fue con motivo de la salida del primer disco de Jamie 4 President y recuerdo que, por aquel entonces, Jamie me confesó que nunca se había planteado hacer un disco en solitario. Pues bien, con Dolphins ya van dos y, a tenor de la evolución a todos los niveles que evidencia esta nueva colección de canciones, su carrera va para largo. Dolphins confirma que J4P están en su mejor momento, y que Jamie no hizo mal cambiando la pelota por la guitarra cuando tenía doce años gracias a un famoso vídeo clip de Nirvana. Aunque siempre nos quedará la duda de si, por culpa de esa decisión, el mundo del balompié se ha perdido a uno de sus astros.

¿Qué ha cambiado principalmente desde Where did our youth go?
En lo que a lo interno se refiere, ahora mismo hay más sensación de banda que antes, cuando era claramente más un proyecto personal. En el primer disco compuse las canciones, reuní a los músicos y directamente entramos a grabar mientras que en este último las compuse, las trabajamos los cuatro durante el verano (yo, Óscar de la Fuente, guitarra y productor del disco, Daniel Crespo, bajista y Pablo González, batería) puliendo y modificando estructuras y luego entramos a grabarlas. Por eso nos está resultando más fácil llevar las canciones de “Dolphins” al directo y creo que en el “live” ahora nos desenvolvemos mejor. Si hay que comparar los dos discos son muy diferentes a la vez que parecidos. Hay diferencias claras en el tono general y en la producción pero en ambos casos se ha hecho exactamente el tipo de disco que apetecía en ese momento. Con “Youth” la intención era hacer un disco redondo de pop con canciones concisas y en “Dolphins” era hacer un disco con diferentes colores, donde cada canción es distinta pero complementaria a la anterior, dejando algo más de cancha a las aportaciones instrumentales de cada miembro sin meternos en canciones de más de 3 o 4 minutos. En cuanto a lo externo, supongo que a alguno más le suena el nombre de la banda y que, al llevar ya algo más de rodaje y haber grabado dos discos, ya se nos exige algo más, lo cual me parece positivo, así uno no se duerme.

¿Cuales son los planes de la banda a corto plazo?
En el último mes hemos subido el disco nuevo a nuestro Bandcamp, a Spotify, i-Tunes y demás plataformas y tenemos ahora pendiente la edición física del álbum. Aún queda algún despistado por ahí que compra música. Yo aún valoro la sensación de tener un disco que te guste en las manos y creo que hay muchos otros que también (han subido las ventas de vinilos). Tengo que reconocer que aunque sigo comprando música compro menos, igual que sigo yendo al cine pero sólo voy a ver las pelis que realmente tenga ganas de ver. Bueno, es normal, tengo mis propios discos que grabar y eso no es gratis (risas). Estaremos presentando también el disco en directo como es lógico. Estamos cerrando ahora fechas y hay muchas ganas de tocar por ahí ya que hemos tocado bastante en Madrid pero aún no hemos actuado en Barcelona, por ponerte un ejemplo. Nuestro próximo concierto es en Málaga con Modo Bélica y tenemos muchas ganas. No hemos tocado nunca con ellos a pesar de ser amigos y hace tiempo que no tocamos en Málaga, lo que fue nuestra casa (bueno al menos de 75% de la banda). En cuanto a promo tenemos un par de cosas en marcha para darle un empujoncito al disco.

¿Crees que hace falta estar en Madrid para conseguir sacar un proyecto como J4P adelante?
Buena pregunta. Sinceramente no creo que haga falta estar en Madrid, es complicado sacar un proyecto como este adelante en cualquier sitio. Sí he notado que, por ejemplo, en una ciudad como Madrid hay más opciones de estudios de grabación en cuanto a calidad/precio y eso facilita algo las cosas en ese sentido. También hay más salas donde tocar pero más oferta a la vez, con lo cual tampoco es fácil llenar esas salas. Hay más músicos pero ya tocan todos en un mínimo 3 bandas. ¿Me entiendes por dónde voy, no? Creo que para sacar un proyecto así adelante hay que tener confianza en sí mismo, paciencia y humildad. No me parece que grupos como el nuestro hagamos una música anti-comercial ni mucho menos pero sí es música que requiere una cierta implicación e interés por parte del oyente pero que a la larga lo recompensa. En la época en la que nos encontramos, pese a las “herramientas” que tenemos, en mi opinión lo que sale adelante sin tanto sudor son los hypes en el mundo indie o los artistas mainstream que ya son otro rollo. Bandas como la tuya o la mía tenemos que seguir currando y seguir creyendo, y allí estamos.

Te pongo en una complicada tesitura: el local o la carretera.
Pues diría que ambas cosas van de la mano. A mí todo el proceso creativo de componer temas y darles forma en el local antes de sacarlos a pasear siempre me ha encantado, pero cierto es que en mis experiencias en bandas con lo que me quedo luego es tocar en directo. Esa complicidad que hay entre compañeros de banda de coger la furgoneta y llevar tus canciones a sitios desconocidos con gente desconocida es impagable. Es algo así como ver la semilla crecer y es muy gratificante. Cierto es que sin todo ese trabajo de local no tiene sentido coger la furgoneta. Lo que cada vez disfruto más es del proceso de grabación que antes me resultaba menos gratificante y más pesado y con cada grabación en la que participo mayor satisfacción saco. Lo que es local + estudio de grabación + carretera es un conjunto que me ha dado algunos de los mejores momentos de mi vida y en gran parte es por lo que sigo haciendo música. Luego el mundo de la música conlleva otras cosas tediosas que me gustan bastante menos, pero bueno, volviendo a tu complicada tesitura inicial, si tuviese que elegir optaría por la carretera.

¿Por qué “Dolphins”?
Cuando le puse a mi madre por primer vez “Where did our Youth Go?” me dijo que la guitarra de Óscar de la intro del tema titular le sonaba a delfines llorando (crying dolphins, mi madre es inglesa). Se lo dije a él y nos pareció a ambos una manera muy poética de describir una línea de guitarra. Dijimos que algún día montaríamos un dúo con arpegios de guitarra endiablados en loop y nos llamaríamos Crying Dolphins. Incluso llegamos a sacarnos unos temas pero nuestra carrera musical se limitó a un solo concierto para una sola persona durante una fiesta en casa, donde tuvimos que tirar la toalla a los 5 minutos porque ni nos acordábamos de las canciones ni estábamos en condiciones para tocarlas. Cuando empezamos a preparar el disco nuevo y se sabía que Óscar se iba a encargar de la producción volví a sacar la idea de “Crying Dolphins” que acabó en “Dolphins” ya que sonaba más limpio y a nombre de disco. Me parece un título coherente con el sonido del disco y Dani y Pablo nunca lo han cuestionado con lo que supongo que les gusta. Me satisface porque detrás del título hay amistad, complicidad y colaboración musical y todo salió de un comentario de mi querida madre. Aparte de todo eso, me parece una palabra bonita y el delfín un mamífero fascinante.

Un pajarito me ha contado que tienes en mente hacer un vídeo clip de alguno de los temas del disco. ¿Podrías adelantarnos algo?
Pues tienes un pajarito muy bien informado (risas). Llevábamos un tiempo contemplando lo de hacer un video clip y, aunque suelo darle más importancia a otras cosas del grupo, no hay duda de que es una herramienta importante a la hora de darte más a conocer o simplemente hacer algo artísticamente interesante. Tengo dos amigos ingleses aquí en Madrid, John Reck y Harry Smyth, quienes forman un equipo director/guionista. Hace poco lanzaron un corto fantástico que se llama “Duplicity” y acaban de estrenar un videoclip para Moontrap, el grupo de Harry, que se llama “The Night Timers”, muy inspirado en el cine de terror de los ’70 y muy recomendable. Una noche estaba John en mi casa y le puse las pre-mezclas del disco. Me dijo que una de las canciones le había llegado especialmente y que se le había venido a la cabeza un proyecto que empezaron los dos pero que no llegaron a acabar. Algo así como el retrato de una pareja algo “tóxica” y destinado al fracaso con reminiscencias “Paris Texas”, “Chungking Express” o “Eternal Sunshine…”. Vaya, tres de mis películas favoritas. Pero claro, todo en 4 minutos que es lo que tiene el medio del vídeo clip. Por lo que sé ya están haciendo los últimos retoques de guion y demás para empezar a rodar a principios de Marzo y estamos todos muy ilusionados de ver el resultado.

En la entrevista que te hice con motivo de la salida de tu anterior trabajo, me comentabas que nunca te habías planteado hacer un disco en solitario y ya vas por el segundo. ¿Te sientes más cómodo con esta forma de trabajar en la que tú llevas todo el peso de la composición?
Bueno, para empezar me gustaría destacar el trabajo de los otros tres miembros en este álbum y decir que la banda en general ha tenido más input en cuanto a la composición de este disco. “Dolphins” pudo empezar en la cabeza de una persona pero el resultado final es realmente un trabajo de cuatro. En general me gusta mucho colaborar a la hora de hacer música y quizás me falte algo de ego para ser un “solo artist” hecho y derecho. Lo de llevar el peso de la composición es complicado porque por un lado, como dices es más cómodo porque no tienes que sacrificar ciertas cosas y satisfacer a todo el mundo y también es gratificante poder realizar tu visión al 100%. Al tener tú mismo la última palabra en cuanto a una canción o una decisión es cierto que las cosas suelen marchar con más rapidez pero todo esto tiene otra cara más amarga. Cuando haces algo que no gusta o algo no sale bien hay menos responsables y eso es duro. Sinceramente no creo que me hubiese atrevido con un proyecto así hace diez años ya que me hubiera arrugado antes ante las posibles reacciones negativas. También cuando enfocas así la composición hay más presión porque si te bloqueas y no salen las canciones, o no con la misma facilidad o calidad, es tremendamente frustrante y empiezas a cuestionarte muchas cosas. Resumiendo, tiene lo mismo de bueno que de malo y aunque me siento cómodo con esta forma de trabajar para mí no es la única forma.

Sé que te gusta viajar, el cine y los libros. Con el típico ritmo de vida contemporáneo, y viviendo en una gran urbe como Madrid, ¿te cuesta trabajo encontrar tiempo para estas otras pasiones?
Pues sí, es complicado y cada vez más. Muchas veces pienso que con la edad que tengo tendría que haber viajado mucho más ya que eso te aporta experiencia y cultura pero me resulta difícil encontrar el tiempo y aparte suelo encontrar otra cosa en la que gastarme el dinero. Estar implicado en la música de forma activa ya te quita bastante, aunque por otro lado te puede dar la oportunidad de viajar y eso es bonito, un poco como te decía antes, llevar tus canciones a lugares que son desconocidos para ti es muy grande. En los próximos meses tendré la oportunidad de visitar algunas ciudades en donde no he estado para tocar y por ello me siento afortunado. Con el cine voy un poco por rachas. Siempre que se estrena algo que me interesa intento verlo en la gran pantalla y en casa pues eso, depende. Vi ayer el tráiler para la peli que han hecho sobre la vida de Brian Wilson y tiene muy buena pinta, ésa esperaré para verla en el cine pero no se estrena hasta verano. Igual que por lo que dices del ritmo de vida contemporáneo parece ser que la gente invierte más tiempo en ver series que películas, aparte que la calidad de las series de tv en los últimos 15 años ha aumentado muchísimo. Hay menos tiempo, más información y muchos whatsapp a los que responder así que quizás preferimos algo más inmediato. Si llevamos esto a la música, el Ep es un formato muy jugoso por esta razón. Libros no leo todo lo que leía y lo que debería pero en mis ratos libres lo intento y ahora que he dejado la mala vida tengo menos excusa para no hacerlo (risas).

¿Qué libro tienes colocado en estos momentos encima de la mesita de noche?
Tengo pendiente empezar “Inherent Vice” de Thomas Pynchon, que a ver si consigo leérmela antes de que vea la adaptación cinematográfica que ha hecho el que es mi director favorito contemporáneo, Paul Thomas Anderson, y que se estrena en España ya mismo. También “Slaughterhouse Five” de Vonnegut que me recomendó un amigo, indignado de que no me lo había leído ya que me las doy de haber sido estudiante de literatura norteamericana del siglo XX. Mi novia tiene la manía de regalarme libros de los Beatles, de lo que no me quejo, y actualmente estoy ojeando uno que me regaló hace poco que se llama “Read the Beatles” y es una colección súper interesante de entrevistas y escritos que se han publicado sobre ellos a lo largo de los años. Viene enterita la entrevista esa que hizo Lennon diciendo que eran más grandes que Jesucristo, que cuando lo lees te das cuenta hasta qué punto los gilipollas de la época lo sacaron de contexto. Hace poco aborté mi tercer intento de leerme “Ulises” ya que nunca lo hice en mi época de estudiante y aunque no tengo duda de que sea una obra única y de que Joyce fuera un genio, la vida también es muy corta (risas).

Están volviendo los 90 o el espíritu de la época y sé que tú ahí te sientes como pez en el agua. ¿Cuáles fueron las bandas que despertaron en ti el deseo de convertirte en músico?
Esta pregunta es una putada y lo sabes (risas). Bueno, supongo que tienes razón con lo que dices del revival 90’s y conque me siento identificado con esa época ya que esa década fueron mis años formativos en cuanto a la música y creo que al fondo eso no se puede disimular, simplemente sale. Es gracioso porque cuando grabamos “Where did our Youth Go?” en ningún momento nos planteamos de que estábamos haciendo un disco muy 90, que fue un comentario que recibimos a menudo al editarlo. Simplemente salió así. Con el auto-sabotaje que caracteriza Jamie 4 President, al grabar “Dolphins” decidimos que quizás queríamos darle un pequeño vuelco al sonido y que fuera menos 90 ¡y ahora resulta que todo el mundo quiere hacer un disco que suene a esa época! De hecho, la otra banda que tengo, Wild Animals, publicamos ahora nuestro primer Ep y tiene muchísimo rollo de esa década así que la influencia es innegable. Igual si nos damos prisa podemos grabar J4P otro antes de que pase la fiebre, aunque para cuando esté grabado probablemente estaremos en el revival de los 00, que no sé cómo sería ya que esa década fue un revival en sí. Bueno, a ver, que me estoy escaqueando de tu pregunta. Crecí escuchando rock y pop clásico por la influencia de mis padres y luego fui descubriendo el indie y sus subgéneros como por ejemplo el shoegaze, el lo-fi o el emo. Creo que una mezcla de todo eso se puede percibir en la música de Jamie 4 President. Posiblemente, la banda que haya escuchado más de todos en mi vida sea The Smiths ya que empecé a escucharlos con 12 o 13 años y aún sigo haciéndolo de vez en cuando mientras que a otras bandas que me marcaron no. Johnny Marr está seguramente en el puesto más alto de mis top 10 guitarristas. Si me permites me quedo con un momento clave en el que se me despertó ese deseo de ser músico y como muchos de mi generación fue la primera vez que vi el video de “Smells Like Teen Spirit”. Tenía unos 12 años y era un domingo en casa de un amigo donde dormía ese fin de semana. Ya estábamos empezando mis colegas y yo a interesarnos por la música, pero nos despertamos, vimos ese vídeo y ese día de golpe perdí el interés por el fútbol y otras cosas que me habían llenado hasta entonces y quise coger una guitarra y darle porrazos sabiendo ya que mi vida de alguna manera iba a cambiar para siempre. Así fue y sé que no es nada original, pero es la verdad. Un placer hablar contigo y nos vemos el día 12 de Marzo compartiendo escenario.