En Sevilla la lluvia es una maravilla. También lo son las bandas que nos están dando a conocer la gente de Lunar Discos, ayudados por sus paisanos y colegas más veteranos de Green Ufos. Casi a la vez que los excelentes Coppermine llega la refulgente reválida de Hidalgo. Sí, suena a apellido y es que el alma y fundador de este cuarteto es su cantante, guitarrista y compositor, Carlos Hidalgo.
Ellos también participaron el año pasado en ese destacado “Bajo Un Cielo Prehistórico: Un Homenaje a The Church” con la destacada “Lost” que tenemos también aquí en castellano como “Perdidos”. No son una banda fácil de etiquetar y por sus canciones se pasean sonidos de las tres últimas décadas sin problemas de convivencia. Arrancan por todo lo alto con el single “Nadie comprenderá”. Las guitarras tienen un claro protagonismo en ella, aunque también en bastantes temas más. Así en “Mi colección” suenan a Pixies y The Jesus And Mary Chain, pero dejan también espacio para un destacado estribillo. Viven en Sevilla, “A pleno sol”, y quizás por eso en dicho tema suenan más acústicos y relajados recordando a Luna o a los anteriores Galaxie 500. Al referirse a ellos se dice que pueden tomar el relevo de El Niño Gusano o Surfin’ Bichos. Pues bien, “El baile del Niño Gusano” es un buen homenaje al grupo maño. Su
pasión por el folk se manifiesta en la preciosa, noctámbula y relajada “Luna”. En ella vuelven a destacar los teclados y también tenemos que resaltar el trabajo a las percusiones y voces del capo del sello Lunar Discos, José Luis Osuna. El lado más psicodélico les sale en “Ada”. Aquí y en otros momentos se les nota que también han escuchado a los Mercury Rev o a The Flaming Lips. Para el final se guardan su particular “Paseo por Andrómeda”, el más guitarrero y cercano a los sonidos de fines de los 80 y los 90 con representantes como Sonic Youth. ¡Me gustaría comprobar pronto si pueden relucir también y tan brillantes en vivo! (8,5)

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