Regresan con disco oficial uno de los secretos mejores guardados del pop-rock británico del nuevo milenio. Y es que han pasado ya 4 años desde el anterior trabajo de estudio y aventuras varias como bandas sonoras o reediciones. Antes estaban en otro prestigiosos sello como Rough Trade lo cual habla bien  y mucho de su calidad.
Siempre han sido personales y difíciles de clasificar pues tomando como base el rock-pop más o menos épico, nunca han tenido miedo de añadir detalles folk, algo de electrónica y aromas post-punk. De hecho se les ha comparado con bandas como Belle And Sebastian, The Smiths, Big Country, Elbow, Suede o incluso Joy Division. Yo también les veo nexos de unión con los The National del otro lado del charco.
Tras una intro comienzan con una melodía realmente bonita y esa voz algo cercana a The Cure de “Bad bohemian”. Se marcan guapos mantras vocales sobre colchones de teclados hermosos como sucede en “What you’re doing”. También añaden guitarras post-punk como las de “The voice of Ivy Lee” con un ritmo y tono que vuelve a recordar a Joy Division, pero con tonos más alegres y cuidados arreglos. También crean buenos estribillos pegadizos como los de “Keep on trying (Sechs freunde)”. Los momentos más rock y a base de guitarras llegan en “Saint Jerome”. Luego se marcan emotivos lentos como “Praise for whatever” o un “Want to be free” que es de esos momentos en los que pudieran gustar a los seguidores de The National o incluso los Radiohead del “O.K. Computer”. ¡Siguen con su buena trayectoria y cada vez más personal!. (8)

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