Ha llegado el momento de la verdad para el trío neoyorquino. Y es que aunque este sea su segundo disco como Augustines lo cierto es que debutaron ya en 2011 con otro anterior en el que todavía eran We Are Augustines. Su indie rock, con la poderosa y agradable voz de Billy McCarthy al frente, encandilará a quienes gusten de propuestas repletas de emo-ción como las de The Frames y The Hold Steady y sus respectivos líderes, Glen Hansard y Craig Finn.
En la trabajada producción les ha ayudado un experto y consagrado todoterreno como Joe Chiccarelli que también se ha encargado de las mezclas. Los toques épicos en las guitarras surgen ya desde la potente y luminosa “Are we alive?” que realmente los muestra más vivos que nunca. Otro buen single conocido previamente es “When things fall apart” que hasta puede tener algo de los Simple Minds de su periodo de esplendor a mediados de los 80. El lado más relajado y descarnado surge en la preciosa melodía vocal de “May you keep well” que encantará a los fans de Glen Hansard, pero también a seguidores de los momentos más relajados de Bruce Springsteen. El lado más electrónico y bailable viene de la mano de “Running in place”. Tenemos otros emocionantes temas lentos como “Landmine” con un regusto hasta de Ben Harper. El lado más rockero, con unas fulgurantes guitarras de entrada, aparece con “No need to explain” con ese rollo de rock épico de estadio. Acaban también en un punto alto con “Days roll by” con otra buena melodía y esa especie de euforia contenida que proporciona buenas dosis de emoción. ¡Se habrán quedado “Agustín-es”!. (8)

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