Las fotografías de Shogo Yoshida nos ofrecen una ventana a ese país tan interesante como desconocido que es Japón. Su trabajo nos lo muestra cotidiano, a pie de calle, no vemos los típicos reclamos turísticos que han sido utilizados millones de veces si no lo que veríamos si fuesemos a comprar el pan. Callejones, escaleras, calles abarrotadas, aparcamientos, vehículos… nada escapa al ojo de este ávido observador enamorado del blanco y negro y de la fotografía con película. Una mirada sincera a un país fascinante.
Hola, mi nombre es Shogo Yoshida. Soy un fotógrafo japonés Me empecé a interesar en la fotografía la primera vez que fui a Estados Unidos a ver un show. Fue en ese momento cuando compré mi primera cámara para recordar esos momentos, pero cuando volví a Japón mi vida se volvió muy estresante y buscando una manera de liberarme de ese estrés, en principio intenté escribir algo de poesía pero me resultaba tremendamente embarazoso, me decidí a salir a la calle con mi cámara y hacer fotos que expresasen mi estado de ánimo. Esa es la razón principal por la que me empecé a interesar en la fotografía, para traducir mis emociones en fotos y expresarme.
Mi trabajo esta muy conectado a mi estado de ánimo y enfocado a expresar lo que no puedo expresar con palabras así que me es muy difícil describirlo con palabras, fotografío cosas diferentes cada día y nunca me he decidido por nada concreto en cuanto a mis gustos. Para mi disparar mi cámara es mi manera de lidiar con mis emociones, como la ira o la tristeza, así que cuando no sienta estas cosas supongo que la dejaré.
Normalmente sostengo una bebida en una mano y mi cámara en la otra, por lo que muchas veces cuando revelo los carretes me sorprendo a mi mismo al ver las fotos que he hecho ese día. Realmente no tengo ninguna motivación, me dejo llevar directamente por mis emociones. Me inspira lo que a todo el mundo, el cine y la música. Recordar ritmos y melodías es algo natural para mi, y eso se refleja de forma natural en mi trabajo.
Me gusta disparar con película, no soy muy amigo del formato digital. Con el formato digital puedes ver las fotos recien hechas y eso no me atrae demasiado. Lo que realmente me gusta es beber alcohol y disparar mi cámara a todo lo que se me ocurra (risas).
Mis planes para el futuro no existen, solo quiero tomar el tipo de fotos que solo yo puedo tomar y enseñarle al resto del mundo mi visión de Japon, me conformo con eso.