Cada vez es más numerosa la corriente de jóvenes artistas que se decantan por utilizar las antiguas cámaras analógicas para capturar su vida diaria y aventuras. Romje es uno más, mostrándonos lo que libertad y diversión significan para él a través del visor de su cámara.
Me crié en Suiza, cerca de Génova, rodeado de montañas y lagos.
Con mi cámara retrato mi vida, mis amigos, mis viajes y eso me sirve para aprender de la vida y de uno mismo.
Utilizo cámaras de carrete por las tonalidades y lo impredecible que resulta de disparar analógico. Utilizo digital para tomar instantáneas de prueba o para escenas estáticas.
Actualmente estoy trabajando en una exposición sobre mis viajes.
No sabría decir que es lo más difícil que he tenido que hacer.
Me inspira la música, las películas, las fiestas y las revistas antiguas entre otras cosas. Mis ídolos cambian con mi estado de ánimo
Lo que más escucho ahora es “Trippin´ Like I do” de “The Mystic Braves”. Para comer, guacamole con nachos, nunca falla.
Mi talento secreto es ser bueno y sonreír.
A la hora de desconectar, una combinación de música, natación, buena comida y amigos.