Dane se ha criado en el sur de California hasta los 21. Luego se mudó a la costa este de Australia persiguiendo su carrera de surf. Y allí se enamoró de la fotografía. Doce años después volvió para vivir en Los Angeles y trabajar de su obra a tiempo completo.

Dane se define humorísticamente como un culo de mal asiento en todos los oficios y maestro en ninguno. Como fotógrafo cubre muchas facetas, desde el surf, trabajo comercial, estilo de vida o editorial. Entre las peculiaridades de su trabajo que más le ha fascinado en estos años de carrera son los retratos, “creo que eso es de lo que personalmente obtengo más placer”, dice. “Hay algo sobre la creación de una sola imagen analógica de y con alguien que hace que te detengas, lo reconozcas, sientas algo y cuente una historia que es extremadamente gratificante”.

Dane trabaja en una amplia gama de medios, desde 35 mm. A 1120 mm. o polaroid y también digital (“cuando es necesario para aplicaciones comerciales” especifica). No sigue necesariamente un proceso. Cuando es obra personal escoge sus propio procesamiento y escaneos en BW. “Se necesita mucho tiempo adicional para hacerlo, pero me encanta ser 100% practico con mi trabajo y tener un control total sobre el”.

También es un gran admirador de las técnicas alternativas de fotografía y actualmente está desarrollando este tipo de proyectos. Impresiones, transferencias de polaroid, cianotipos… todo llegará a una exposición personal más pronto que tarde.

No nos cabe duda de que es un proceso muy duro y complejo, pero Dane nos responde “Es realmente difícil identificar cualquier cosa como la más difícil dentro de mi trabajo. Estoy plagado de ser un perfeccionista y bastante pedante. Lo cual es un desafío en sí mismo. Y también tomo técnicas de película operadas manualmente en su mayor parte. Al hacerlo, todo es un desafío, especialmente si realmente respetas el medio”. Como nos detalla, en la fotografía se desarrolla en su propio proceso más la idea de solución de problemas que el irte encontrándolos. Se trabaja creando paletas de colores, escenarios, iluminación… No es un proceso combativo, sino aperturista. Dane nos explica que es un arte que no cree que llegue a dominar por completo, “si alguien dijera lo contrario, están llenos de mierda o de sus propios egos”.

¿Y la inspiración? ¿Es igualmente tan abierta? Dane responde siempre honestamente. Se nota su alma de surfero: “La inspiración para mí se deriva de varias cosas. Algunos días puede provenir de algo tan simple como una pared de hormigón con textura y otros días puede provenir de un elemento en el trabajo con ancianos que tanto admiro en artistas como Irving Penn o Mark Borthwick. Mañana podría provenir de un momento tranquilo compartido con mi la hermosa novia Kayla y las nubes que se arremolinaban sobre nuestras cabezas, o una vieja película que acabo de descubrir por primera vez y me encanta su paleta de colores… Todas estas cosas me generan ideas que me ponen en marcha”.

Dane nos comenta también sobre música y un estribillo de la canción Mental Breakdown de John Maus que es incapaz de sacarse de la cabeza:

“What the fuck is going on?
Our thoughts are stupid from the city sun.
And I think I lost my mouth again.
Busted
Oh yeah, oh yeah”.

Dane niega tener algún talento secreto y pone en duda a quienes nos responden esta pregunta. No cree tener ninguno pero como buen fotógrafo concluye como mucho en lo que dicen de él otras personas: “me han dicho que sé que soy un buen oyente y que no tengo dificultades para relacionarme con las personas. Esto generalmente permite un buen nivel de apertura entre ellos, y supongo que puede crear un nivel cómodo de vulnerabilidad entre mis sujetos y yo. Lo que a cambio se presta para crear un trabajo hermoso a veces”.

Dane no tiene mucho tiempo libre con tanto trabajo. Dice que es su problema a solucionar, porque salta de un proyecto a otro sin coger a penas aire. ¿Puede ser adicción? “Pero sí valoro la última hora de la noche antes de acostarme acurrucándome con Kayla y nuestro perro Cosmo. Bebiendo un té para ir a dormir y dejándome caer”.

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