Brin Levinson se ha criado en una granja de campo en Vermont. Se trasladó a California para estudiar arte y animación cuando tenía 20 años y actualmente trabaja en Portland.
Brin se especializa en pintura al oleo, colabora en varias expos cada año y realiza encargos. Esto ocupa su vida laboral a tiempo completo, “es una manera muy gratificante de vivir”, nos dice.
Sus temas artísticos mezclan paisajes urbanos con fauna animal. Usa mucho de referencias fotográficas, que organiza y estudia cuidadosamente, montando un inventario de referencias.
Actualmente tiene muestras preparadas para Antler Gallery de Portland y la Haven Gallery de Nueva York.
Brin percibe la inspiración como algo natural, nota un impulso innato de crecer, trabajar y evolucionar. Se implica mucho en las ideas a expresar y en cómo están en las formas e imágenes. “Experimento el mundo visualmente”, dice.
Considera que el mundo está lleno de genios que admirar, pero especialmente el Dalai Lama por su bondad y fuerza.
Considera que la fuerza más importante de su trabajo está en el equilibro entre realismo y surrealismo, mantiene la línea en su imaginación, haciendo las imágenes potentes.
Como buen artista observador, una de sus pasiones es salir a caminar o montar en bici, especialmente por la montaña.
www.brinlevinson.com