Bienvenidos al espacio exterior. Allí es donde nos lleva este cuarteto afincado en Filadelfia, y todo a base de jams estratosféricas, psicodelia, guitarras sinuosas y mucho, mucho espacio sideral. Para este su segundo trabajo, “Raw Rock Fury“, los americanos han decidido dejar una pequeña ancla en la tierra esta vez, solo para que no nos perdamos en nuestros viajes espaciales. Esta ancla podría ser perfectamente la impresionante batería, que sin apenas cambios de ritmo crea una sensación de progresión que queda muy bien arropada con la esporádica aparición de un saxofón que termina de dar la puntilla al salvaje sonido de esta banda.
Como es lógico tardan poco en aparecer las similitudes con bandas como Hawkind o MC5, pero también se puede hablar de formaciones mas modernas, como los noruegos Spidergawd, donde militaba la base rítmica de los dioses nórdicos Motorpsycho, y que llevan un rollito bastante similar al de estos americanos.
Muy acertado el dividir las extensas jams que forman las canciones de este disco en diversas partes cada una, aunque la escucha mas recomendable sea la de principio a fin sin interrupciones, porque todo el disco parece sacado de la misma sesión de consumo de psicotrópicos. En definitiva, este es un disco para disfrutarlo con tiempo, haciendo una escucha inmersiva y a ser posible, ya sabéis, fumando o comiendo alguna cosa natural. (8)